"Recurrir a la procesión por cualquier motivo no es positivo para los cofrades"

Ante los cambios en diferentes órdenes en el gobierno de la Diócesis, ¿es posible que se lleve a cabo algún cambio en la normativa cofrade, la referida a salidas extraordinarias?

Ciertamente no hay previsión de que así suceda. El obispo no ha dicho nada; está ahora en otros ámbitos de la diócesis, pero en esto en concreto no hay nada. Es lo que hay de momento.

En este terreno de las extraordinarias, ¿considera que se ha perdido la medida y proporción?

Entiendo que sí hay demasiadas salidas; seria necesario volver a cumplir el decreto que establece que esas procesiones son singulares; debe volver ese espíritu que se establece en el decreto vigente: los aniversarios de las hermandades cada 25 años o múltiplos de esta cifra. Si no es así, dónde queda lo extraordinario.

"En las extraordinarias hay que volver al espíritu que inspira el decreto vigente"

¿Es más negativo que positivo tanta procesión en la calle, ya sea en parihuela o en sus pasos?

Como se ha dicho ya, estamos convirtiendo lo extraordinario en ordinario. Eso no es bueno. Cada cosa tiene su sentido. Recurrir a la procesión por cualquier motivo no es positivo para los cofrades. Incluso se están viendo algunas salidas que no van a acompañadas de un público suficiente ni despiertan interés. Salimos para evangelizar pero si no se consigue atraer a la gente se pierde todo el sentido.

Entonces, la escasez de público en las aceras, ¿lo convierte en un sinsentido?

Salir a la calle supone celebrar algo extraordinario; también es fundamental otro objetivo, evangelizar. Si no hay un apoyo popular esto no se consigue. Cuando se plantea una salida extraordinaria se hace con ese ánimo evangelizador no porque sale una banda extraordinaria. Son planteamientos que los cofrades tenemos que estudiar e incluso variar.

Además del trabajo que supone, está el coste económico que tiene una iniciativa de estas características que, tarde o temprano, repercute en los hermanos.

En el decreto de salidas recoge que éstas deben venir aprobadas por un cabildo de hermanos. Además se exigen unos actos previos de preparación y un presupuesto económico para el que también se debe aportar el acuerdo de los hermanos sobre cómo se financia. Se ha hecho frente a la pandemia buscando donde no había; las hermandades no han parado de atender las acciones sociales individuales o conjuntas que se han llevado a cabo. Lo que sí está claro es que las arcas de las cofradías están muy debilitadas. Si ahora se plantea una extraordinaria es imprescindible que se entre en lo económico para que no afecte a la gestión ordinaria de la hermandad. Y ojo que en las cofradías también hay gente que lo está pasando mal por la situación actual por lo que no todos pueden asumir una cuota o gasto especial. Todo esto hay que tenerlo en cuenta.

Otro capítulo es lo de las procesiones magnas. Van surgiendo propuestas, ideas, ganas, e incluso alguna se ha concretado como en Cádiz. ¿Hay alguna propuesta sobre la mesa?

Peticiones como tal no, lo que hay es una carta con un proyecto que se presentó por el Consejos de Hermandades de Sanlúcar apoyada en el quinto centenario de la circunnavegación; la respuesta va en consonancia con lo que se exige: que cada hermandad convoque un cabildo en el que los hermanos den su aprobación a participar en ese evento, estar de acuerdo con los gastos que implica y después el obispo es el que aprobará o no. Si no es así, puede llegarnos algún hermano mayor alegando que no está de acuerdo con la propuesta porque no tiene cómo pagar la salida y que si tiene que participar quién lo paga.

" Se ven salidas que no van acompañadas de un público suficiente ni despiertan interés"

Tantas ganas de hacer algo importante y conjunto, ¿puede achacarse a los dos años en blanco que han quedado atrás?

Las ansias que hay nos está llevando a hacer cosas que no estaban en la normalidad. Hemos dejado atrás una buena y normal Semana Santa, que incluso ha tenido su lluvia. En lo de las extraordinarias, son muchas las peticiones que nos llegan y muchas las que no salen adelante, tras consultarlo con el obispo. Aunque no voy a desvelar nombres, son bastantes las que llegan aquí que son rechazadas; insisto en que hay que mirar el decreto que establece los requisitos para estas procesiones, que ya hemos comentado; también suceden eventos como el traslado de Las Angustias a la Catedral en octubre con motivo del Congreso Nacional de Hermandades y Cofradías de Nuestra Señora de las Angustias que dada la cantidad de personas que asistirán de toda España obliga a desarrollar la misa en la Catedral. Eso es un hecho excepcional.

Así las cosas, en el clásico ‘otoño cofrade’ solo tenemos el evento de Las Angustias y la extraordinaria del Santo Entierro.

Además de dos extraordinarias en Sanlúcar: El Huerto y la Triunfal Entrada.

¿Se acabó la 'manga ancha'?

Desde la delegación lo que hacemos es pasar las peticiones al obispo; actuamos como un fiscal de normas advirtiendo si las acciones que se proponen se ajustan o no a derecho. Sí es cierto que el prelado ha tenido a bien dar una serie de permisos que antes de la pandemia no habrían salido adelante. Entiendo que conforme se avance en la normalidad todo irá a su cauce. Es verdad que las hermandades han respondido durante la pandemia de forma importante; teniendo o no recursos, se han buscado para una ingente ación social que se ha llevado a cabo. Una forma de dar las gracias ha sido esa. De algunos pueblos pequeños, los párrocos nos hacían llegar la necesidad de satisfacer los deseos de algunas hermandades por el trabajo que han hecho. A los cofrade hay que darles alegrías o apoyar sus aspiraciones cundo lo que ha quedado atrás ha sido duro para todos y, lo que es más importante, ante la realidad de las hermandades respondiendo ante las necesidades sociales.

El obispo ha decretado el nuevo gobierno de la diócesis aún sin nombres. ¿Espera seguir en la delegación de hermandades?

No espero nada. Cuando llegó el nuevo obispo le puse mi cargo a su disposición. Entiendo que tendré que cambiar más tarde o temprano. Siempre digo lo mismo, no tengo apetencia de cargo alguno; si mañana decreta un cambio aquí, bendito sea Dios. Seguiré trabajando por las hermandades desde mi cofradía o desde mi parroquia. Aquí estamos para prestar un servicio, el que no lo tenga claro está equivocado. Tardo un ratito en recoger mis cosas y se acabó.

En julio se corona la Virgen de los Dolores de Sanlúcar, el año próximo llega la coronación de La Estrella en Jerez. ¿Solo el expediente de la Soledad es el que está sobre la mesa del prelado?

Sí pero se le ha dicho que tienen que completarlo ya que le faltan los capítulos de formación y caridad. Una vez cerrado el expediente, se le comunica al obispo y ya depende de él concederla o no.

¿Hay buenas vibraciones?

Pienso que sí lo que sucede es que todo el trámite y papeleo es muy tedioso. Le sigue un proceso que puede ser largo hasta que se comunique una decisión. No lo veo fácil o difícil, se ha empezado un camino. La Virgen de la Soledad tiene un fuerte tirón y aunque no me compete a mí, en su momento se leerá el decreto de coronación.