Evocando su historia, La Merced volvió al casco histórico de Jerez

La fiesta de la Virgen de la Merced renovó este sábado la secular tradición en torno a esta advocación que hunde sus raíces en muchos siglos de una historia paralela a la de Jerez. Fue el día de la Patrona, festividad local, en la que desde bien temprano las puertas de la basílica se abrieron de par en par para recibir a cientos de devotos llamados por las misas programadas o para visitar a La Merced en el día de su festividad litúrgica. La mañana tuvo su momento singular con la misa estacional que presidió el obispo Rico Pavés y en la que la alcaldesa, Mamén Sanchez, renovó el tradicional Voto de la ciudad a la imagen.

La tarde fue en exclusiva para la Virgen de la Merced por las calles. La salida procesional tuvo este año una importante novedad localizada en el recorrido, ya que transcurrió, de ida, por la zona intramuros de la ciudad, un cambio que será permanente por diferentes razones, que la Virgen entre en la zona antigua de la ciudad, haciendo honor a su longeva relación con el Jerez creyente, agilizar más la procesión y acortar el itinerario. Son las razones por las que los mercedarios han decidido esta variación que hizo posible un regreso más animado de gente gracias a la comodidad que concede calles amplias para contemplar la procesión como Porvera, Ancha, Santiago y Merced.  Esta modificación no impidió que los grupos jóvenes de las cofradías instalaran alfombras de sal en la calle Merced pero con la salvedad de que el trabajo se llevó a cabo desde primera hora de este sábado. 

La procesión de La Merced de Jerez, en 40 imágenes

La jornada no fue tan calurosa como se esperaba. Incluso, con la caída de la tarde, se dejó notar algo de fresco que nos anunciaba el otoño recién estrenado. Movidos por la novedad, las calles intramuros tuvieron un ambiente singular, especialmente por San Juan y Francos además de la llegada a la iglesia de San Marcos, sede parroquial de los Cuatro Evangelistas, un templo por el que había que pasar y parar, al representar las cuatro primeras parroquias que instituyó el Rey Sabio cuando entró en la ciudad. 

Parada obligada en esta iglesia porque la Hermandad de la Cena instaló en la puerta principal un precioso altar con el Señor de la Cena, la Virgen de la Paz y Concordia y san Juan Evangelista. Tras los rezos y preces correspondientes, este momento fue la mejor salida o desembocadura de la zona añeja de Jerez ya que desde Rafael Rivero, la procesión se abrió a Cristina y Porvera. 

El paso dejó para el olvido las ruedas que se usaron el pasado año, una medida que se adoptó de forma prudente por la vigencia del Covid y sus posibles efectos en el interior del paso. Este año volvieron los costaleros al mando del capataz Martín Gómez Moreno. El nardo volvió a envolver con su aroma el paso adornado como es costumbre con esta flor, donada por los devotos. 

Ante la Patrona estuvo la representación del cabildo Catedral con el obispo al frente, sacerdotes diocesanos y seminaristas. Delante de esta, la corporación municipal en la que estuvieron concejales del PSOE, PP y Ciudadanos cerrando la alcaldesa. El cuerpo central del cortejo lo volvió a constituir las hermandades con representaciones corporativas, las de Gloria, Semana Santa y Sacramentales además de otras instituciones, como la Academia de San Dionisio, y colectivos de la Iglesia local. 

Así fue a grandes trazos el desarrollo de la fiesta de La Merced de 2022. Fue notable, con ambiente de fiesta en las calles, con una normalidad absoluta volviendo a los esquemas tradicionales; una gran participación y el final del ciclo anual mercenario que tiene su culminación en esta jornada, que abre un nuevo año de espera hasta que en el otoño de 2023 devuelva a Jerez una imagen que es icónica en la ciudad tras 700 años de historia.