Un año después del derrumbe que a punto estuvo de causar una tragedia en las antiguas naves de la firma francesa de automoción Peugeot en Jerez, en la barriada del Agrimensor, la zona sigue vallada y cerrada al tránsito peatonal, los escombros amontonados en lo que era una calle y una plaza pública, y el proyecto de obra de un nuevo vial en la zona —entre Fernán Caballero y Hermanos Álvarez Quintero— totalmente paralizado. El Ayuntamiento, a través de la Delegación Municipal de Urbanismo, no ha conseguido todavía, doce meses después, que la propiedad del inmueble se haga cargo de la orden de ejecución que pesa sobre una ruina que afecta al dominio público.
Construido sobre un talud de diez metros con relleno, Urbanismo apuntaba en noviembre del año pasado a la acumulación de agua por las fuertes lluvias registradas esos días como posible causa del derrumbe de un muro de cinco metros del antiguo concesionario y taller mecánico. Después de la primera evaluación, y teniendo en cuenta el abandono y la mala cimentación que sufría un inmueble abandonado desde hace una década, se entiende que la acumulación de agua colapsó el muro de tabiquería hasta desplomarlo. Doce meses después, todo sigue igual. Los vecinos de la barriada preguntan a los reporteros: "¿Sabéis cuándo arreglarán esto? ¿Dos o tres años más nos queda con todo todo cortado, no?
Otra vista de la zona afectada, justo donde pasaba un nuevo vial y donde había una plaza pública. FOTO: MANU GARCÍA
En el acceso a las naves por Ronda Muleros hay un cartel de 'se vende o alquila (total o parcialmente)' una superficie total construida de 3.097 metros cuadrados. El teléfono que aparece en el citado cartel coincide con el de Ibericar Holding Andalucía SL, domiciliada en Málaga, aunque nadie en ese número atiende las llamadas de este medio. El concesionario jerezano, según figura en el registro mercantil, lo explotaba hasta hace unos diez años, justo cuando irrumpió la crisis generalizada, Ibericar Motors Jerez, una empresa ya extinguida y que anteriormente se denominaba Autosherry SL y Talleres San Telmo SLM.
Sea como fuere, el cerrojazo definitivo de la nave y el taller sumieron al inmueble en un profundo abandono que culminó hace ahora doce meses con un derrumbe que pudo haber sido mucho más trágico. No en vano, en el momento en el que el edificio colapsó había trabajadores en la parte baja del talud. Operarios que se encontraban trabajando en el nuevo vial que iba a conectar esta zona con el parque de la Hoyanca para mejorar la permeabilidad de estos barrios del Distrito Sur y que, desde entonces, permanece en el limbo. De hecho, en abril pasado el Ayuntamiento puso en servicio las nuevas conexiones entre la Ronda Muleros y el Distrito Sur y, obviamente, tuvo que anunciar que quedaba en suspenso la que discurre por la zona afectada por el derrumbe.
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