Nueve personas han muerto y otras doce han resultado heridas este martes tras un tiroteo en una escuela de la ciudad austriaca de Graz, en el sur del país. El autor del ataque, un antiguo alumno del centro de 21 años, se quitó la vida después de abrir fuego en el interior del edificio. Las autoridades han confirmado que no se teme por la presencia de más agresores.
El ministro del Interior, Gerhard Karner, ha informado de que el sospechoso no logró graduarse en el centro educativo y no estaba bajo vigilancia policial. Según los primeros datos de la investigación, el joven contaba con licencia para las dos armas de fuego que utilizó durante el ataque. Por el momento, no se ha podido determinar qué lo llevó a cometer la masacre.
Entre las víctimas mortales se encuentran ocho estudiantes y un adulto. La Policía ha indicado que los alumnos ilesos fueron evacuados del edificio y trasladados a un punto de recogida donde los esperaban sus familias. Los heridos, de diversa gravedad, han sido trasladados a varios hospitales de la región.
La Policía puso en marcha una operación de gran envergadura tras los primeros disparos. Al lugar acudieron unidades especiales del cuerpo, entre ellas el equipo Cobra, así como un helicóptero que sobrevoló la zona para coordinar el dispositivo de seguridad. Las autoridades aseguran que la situación ya está controlada.
"En estos momentos no existe ningún peligro adicional", ha asegurado la Policía en un comunicado difundido a través de la red social X. La intervención policial permitió confirmar que el único sospechoso estaba muerto en el lugar de los hechos y que no había más tiradores implicados en el suceso.
El canciller austríaco, Christian Stocker, ha calificado lo ocurrido de "tragedia nacional que conmociona profundamente a todo el país". En una publicación en su cuenta oficial en X, el jefe del Gobierno expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y mostró su consternación ante "este increíble exceso de violencia".
"Un horror indescriptible"
"Una escuela es un lugar de confianza, seguridad y esperanza. El hecho de que un lugar así haya sido sacudido de forma tan brutal nos impacta a todos", ha subrayado Stocker, quien también ha dirigido unas palabras a los heridos y a las personas que vivieron el tiroteo: "Mis condolencias a todos los que han sufrido una agonía mental indecible".
El presidente del país, Alexander Van der Bellen, ha descrito el ataque como "un horror indescriptible". En un mensaje publicado en la red social Bluesky, afirmó que "Austria está de luto" y que el país entero se encuentra "profundamente conmovido" por el crimen. "Eran jóvenes que tenían toda la vida por delante y un profesor que los acompañaba en su camino", lamentó.
Según el diario austriaco Die Presse, el tiroteo en la escuela de Graz es el más mortífero en la historia del país. Austria había registrado dos incidentes similares en las últimas décadas: uno en 1997 y otro en 2018, que se saldaron con un muerto y un herido, respectivamente. Ninguno tuvo el alcance del ataque perpetrado este martes.
