Una joven española, residente en Bruselas, ha lanzado una denuncia pública contra la aerolínea Ryanair a través de un vídeo publicado en su cuenta de TikTok (@carmendiazguadamuro), donde relata el duro episodio que le impidió volar a Asturias para despedirse de su abuelo, que estaba siendo sedado en el hospital y "le quedaban pocos días de vida". Su historia se ha viralizado en cuestión de horas.
Todo comenzó el pasado 6 de junio, cuando Carmen Díaz Guadamuro compró de urgencia un billete de avión para el día siguiente, con la esperanza de llegar a tiempo para ver a su abuelo por última vez. “Me costó 285 ida solo la ida y sin maleta”, explica en el vídeo. No había más vuelos hasta el lunes, y cada minuto contaba. Pero su plan se desmoronó en la puerta de embarque.
Allí, según relata, una trabajadora de Ryanair le indicó que su mochila no cumplía las medidas establecidas por la aerolínea. Aunque sí cabía verticalmente, la empleada alegó que debía entrar de forma horizontal en el medidor, exigiéndole 60 euros extra. Carmen aceptó pagar, pero tras esperar diez minutos con la tarjeta en la mano, le dijeron que la puerta ya estaba cerrada y que había sido desembarcada del vuelo.
"Han mentido"
“Me dice que ya ha cerrado la puerta, que me ha desembarcado y que ya no puedo entrar al avión ni pagando, que según ella yo le había dicho que no quería pagar, cuando eso no es cierto”, denuncia. Según ella, incluso "ha mentido" en el documento oficial del vuelo, algo que un trabajador del aeropuerto le mostró después. “Perdí el vuelo, el dinero y lo peor de todo, perdí la oportunidad de despedirme de mi abuelo. Para siempre. Y nadie me dio ninguna solución para coger ese vuelo o algún otro vuelo".
@carmendiazguadamuro @Ryanair ♬ sonido original - Carmen Díaz Guadamuro
Indignada por la falta de empatía, la joven asegura que explicó su situación a las azafatas, pidiendo poder embarcar, pero nadie mostró comprensión ni ofreció soluciones. Y para colmo, afirma que en ese aeropuerto no hay mostrador de Ryanair, ya que la compañía habría optado por reducir costes al máximo.
Díaz Guadamuro también aprovechó el vídeo para criticar una propuesta que se está debatiendo en la Unión Europea: permitir que cada aerolínea regule sus propias normas de equipaje. “La Unión Europea ha propuesto permitir que cada aerolínea regule su equipaje de forma libre. Eso significa más confusión, más cobres sorpresas y más casos como el mío”, alerta. Una medida que, de aprobarse, dejaría aún más indefensos a los pasajeros ante las decisiones arbitrarias de algunas compañías.
“Exijo una explicación, una disculpa y una compensación”, sentencia Carmen en su vídeo. Y lanza un llamado a otros pasajeros: “Si tú también sufriste algo parecido, cuéntalo. No te calles. Merecemos viajar con dignidad”.
La postura de Ryanair
Horas más tarde, la compañía aérea ha contestado ante esta polémica. "Esta pasajera reservó una tarifa básica para este vuelo de Bruselas Charleroi a Asturias (6 de junio), lo que le permitía llevar una bolsa personal (40 cm x 20 cm x 25 cm) a bordo sin coste adicional".
Así, Ryanair mantiene que "dado que la bolsa de esta pasajera superaba las dimensiones permitidas, se le pidió correctamente que pagara la tarifa estándar por equipaje de mano (60 €) para llevarla a bordo, pero se negó a hacerlo", asegura.
"El agente de la puerta de embarque del aeropuerto de Bruselas Charleroi le informó a esta pasajera que la puerta se estaba cerrando, pero a pesar de ello, ella siguió negándose a pagar la tarifa por equipaje de mano para llevar su bolsa a bordo y perdió el vuelo".
Es decir, la aérea mantiene que "se le informó de que la puerta de embarque de este vuelo estaba cerrando, esta pasajera siguió negándose a pagar la tarifa de equipaje de mano. Solo accedió a pagar la tarifa de equipaje después de que la puerta ya estuviera cerrada y ya no pudiera embarcar". "Cuando se cierra el embarque, se firma un informe legal del manifiesto y se envía al capitán, por lo que no se puede volver a abrir el embarque".


