El Grupo de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil ha reanudado este mañana la búsqueda del menor de 14 años que desapareció el domingo por la tarde en el río Tormes, a la altura de Alba de Tormes, en la provincia de Salamanca. Las labores, que han contado con una parada nocturna, se han retomado con el caudal más bajo, después de que se haya reducido la salida de agua del embalse de Santa Teresa por orden de la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD).
Las autoridades trabajan sobre dos hipótesis
Fuentes de la Guardia Civil han detallado que “se va a tirar desde el punto cero, de la poza, y a partir de ahí se va a buscar”, en referencia al área donde el adolescente fue visto por última vez. Las condiciones del terreno han dificultado la operación debido a la presencia de pozas profundas, fuertes corrientes y fango en el lecho del río, lo que ha llevado a un despliegue coordinado por tierra, agua y aire.
Los GEAS no están solos en esta búsqueda. Participan también efectivos del Seprona, Seguridad Ciudadana y el equipo Pegaso, especializado en vigilancia aérea con drones, además de contar con la colaboración de los Bomberos de la Diputación de Salamanca, la Policía Local, Protección Civil y Cruz Roja, cuyos psicólogos acompañan a los familiares presentes en el lugar.
Zona señalada como crítica por los testigos
La alerta inicial se ha recibido a las siete de la tarde del domingo a través del 112, cuando se notificó que el menor se encontraba bañándose en una zona de cascadas cercana a la piscifactoría, a poco más de un kilómetro del núcleo urbano de Alba de Tormes. Según esa versión, el joven se sumergió y no volvió a salir. Otra hipótesis apunta a que habría caído accidentalmente a una poza mientras jugaba con otros menores.
Ante la complejidad del entorno, la CHD ha atendido la petición de la Guardia Civil para contener el flujo del embalse de Santa Teresa. Esa decisión ha permitido reducir de forma considerable el nivel del río, lo que se espera que facilite el trabajo de los buzos en las próximas horas, especialmente en la zona señalada como crítica por los testigos.
Las labores de búsqueda, que no han dado resultados concluyentes hasta ahora, se centran en un tramo concreto del río donde las condiciones son especialmente peligrosas. Las autoridades han insistido en que, a pesar de los obstáculos, el dispositivo se mantendrá activo el tiempo que sea necesario para esclarecer los hechos y localizar al menor desaparecido.