La reacción de un streamer estadounidense tras atropellar a un hombre durante una retransmisión en directo ha provocado una intensa polémica en redes sociales y ha reabierto el debate sobre los límites del contenido en vivo. El protagonista es Braden Peters, conocido en internet como Clavicular, un creador de contenido con más de 800.000 seguidores repartidos entre TikTok e Instagram, que emitía en directo cuando se produjo el incidente.
El atropello ocurrió mientras el streamer realizaba una transmisión en la plataforma Kick, momento en el que un hombre fue embestido por el vehículo que conducía Peters. Lejos de detenerse o mostrar preocupación inmediata, el creador de contenido continuó la marcha y llegó a pronunciar la frase “¿Está muerto? Espero que sí”.
Un atropello en directo y una reacción que desata la indignación
El vídeo del momento no tardó en viralizarse, generando una oleada de indignación entre usuarios y creadores de contenido. Muchos cuestionaron no solo la conducta al volante, sino también la reacción posterior, considerada por muchos usuarios como especialmente grave por el contexto en el que se produjo, con miles de espectadores siguiendo la escena en tiempo real.
Tras la difusión del video, Clavicular defendió su actuación alegando que se trató de un acto de defensa propia. Según su versión, el peatón lo habría estado acosando previamente, arrojándole objetos, acusándolo de racista y, finalmente, lanzándose contra el vehículo con la intención de interferir en el directo que estaba realizando.
Defensa propia, debate público y versiones enfrentadas
El streamer sostuvo que la situación se había vuelto peligrosa y que su reacción respondió a ese contexto de hostigamiento. Un argumento que ha puesto el foco sobre el comportamiento del público hacia los streamers, algunos de los cuales llevan tiempo alertando de una escalada de actitudes cada vez más radicales hacia quienes emiten contenido en directo en espacios públicos.
Justificar el atropello como un acto de defensa no ha convencido a buena parte de la opinión pública, especialmente a la luz del comentario posterior al impacto. Por el momento, se desconoce si el hombre atropellado emprenderá acciones legales contra el creador de contenido. En paralelo, han surgido versiones no confirmadas de algunos usuarios que aseguran que el peatón habría mostrado un arma instantes antes del atropello, un extremo que no aparece en el vídeo difundido.
Para muchos espectadores, la frase final del streamer sigue siendo clave en la valoración del caso: “Ese comentario final realmente cambia la forma en que se percibe, se siente mucho más imprudente que defensivo, y eso es lo que hace que toda la situación sea inquietante de ver”.


