La Audiencia Provincial de Jaén ha ordenado reabrir el caso del perro que apareció ahorcado en un cortijo derruido de Jódar, resolviendo favorablemente el recurso presentado por la Asociación Protectora de Animales Galgos del Sur. La causa había sido previamente archivada por el Juzgado de Instrucción número 3 de Úbeda al considerar que no existían suficientes indicios de delito.
Los hechos se remontan al pasado 10 de noviembre de 2020, cuando agentes de la Guardia Civil recibieron el aviso de la existencia de este perro por parte de Galgos del Sur y de la protectora Magina Animal. Lo hallaron ahorcado colgando de una viga de un cortijo abandonado en el municipio jienense. Tras la instrucción del procedimiento y pese a la multitud de indicios y evidencias que indicaban de forma clara la autoría de tan macabro hecho, el Juzgado ordenó el sobreseimiento provisional y el archivo de la causa, entendiendo junto al Ministerio Fiscal que la autoría del ahorcamiento no estaba lo suficientemente acreditada.
Ante estas circunstancias, la letrada Dulce Aguilera, del equipo jurídico de Galgos del Sur, presentó un recurso de apelación sustentado en la existencia de múltiples pruebas, indicios y contradicciones en las que incurría el propietario del animal en los interrogatorios practicados en sede judicial. Tras revisar el recurso, la Audiencia Provincial ha decidido estimarlo favorablemente, procediendo así a la reapertura del caso.
“No podemos compartir el criterio expuesto en la resolución recurrida. No cabe duda de que el ahorcamiento deliberado de un perro causándole la muerte resulta indiciariamente constitutivo de un delito de maltrato animal”, afirma el órgano judicial en el texto con el que ha notificado a las partes la reapertura del caso. “La jueza citó a declarar al dueño del animal como investigado y considera que no existen suficientes indicios de autoría contra el mismo. Sin embargo, en las diligencias practicadas estimamos que sí existen suficientes indicios de su responsabilidad”, añade.
La Audiencia Provincial hace hincapié también en las contradicciones en las que incurrió el propietario del perro, que primero dio una versión alegando un motivo falso y posteriormente la cambió por otra. “Merece destacarse que el investigado dio de baja al animal alegando un fallecimiento por accidente, para luego sostener en sede judicial que el perro se le extravió. En sus distintas declaraciones aparecen claras contradicciones sobre cuándo se produjo ese extravío o desaparición, y las circunstancias en que ésta se pudo producir, no constando que hiciera gestión alguna para localizar al animal”, concluye.
Por su parte, Galgos del Sur ha recibido “con mucha satisfacción” la noticia de la reapertura de las diligencias por este “terrible caso de maltrato animal”. "Este pobre animal que murió en la mayor indefensión y de forma muy cruel no puede quedar sin que se le haga justicia", ha expresado el cofundador de la asociación, Javier Luna.
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