La Junta de Andalucía, en el Consejo de Gobierno celebrado este miércoles, se ha posicionado en contra de la Proposición de Ley presentada por Por Andalucía con la que se pretendía impedir que los niños pudieran acudir a los espectáculos taurinos. El Gobierno andaluz, en su dictamen ha aludido a los Derechos del Niño y a la "importancia de las tradiciones y los valores culturales de cada pueblo".
La respuesta de Por Andalucía
El grupo parlamentario Por Andalucía ha expresado su rechazo a la negativa del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ante su propuesta de restringir la participación de menores en espectáculos taurinos, tanto como asistentes como en calidad de participantes. La formación considera que esta postura es coherente con el respaldo que el Ejecutivo autonómico mantiene hacia la tauromaquia, aunque discrepa profundamente de los fundamentos esgrimidos para justificar dicha decisión.
Desde Por Andalucía se cuestiona que el Gobierno andaluz recurra de forma sistemática al argumento de la tradición y los valores culturales asociados a la tauromaquia. A su juicio, esta justificación ignora el carácter violento del espectáculo, centrado en la tortura y muerte del animal, lo que en su opinión no debería considerarse un valor educativo para la infancia.
El grupo parlamentario ha recordado que el Comité de los Derechos del Niño de la ONU ya instó en 2018 a los países con tradición taurina a prohibir la presencia de menores en estos festejos. El organismo advirtió de los posibles efectos negativos que estos espectáculos pueden tener en la infancia, como reacciones de angustia o miedo, así como una posible desensibilización moral al presenciar el sufrimiento animal como forma de entretenimiento.
Por Andalucía defiende la necesidad de garantizar entornos libres de violencia para los menores, con el fin de favorecer su desarrollo personal y educativo. Considera esencial proteger a la infancia de contenidos que puedan interferir en su formación emocional y ética, lo que, en su opinión, incluye mantenerlos alejados de prácticas como la tauromaquia.
