Francisco de Borbón y Escasany, primo del rey emérito Juan Carlos I y padre de Olivia de Borbón, ha fallecido el martes 20 de mayo a los 81 años. Su muerte se produjo apenas diez días después del fallecimiento de su hermano Alfonso, con quien mantenía una estrecha relación. La noticia fue confirmada por su yerno, Julián Porras, a través de un mensaje en redes sociales, en el que expresó que la familia pudo acompañarlo en sus últimos momentos.
La doble pérdida ha supuesto un duro golpe para la familia Borbón y Escasany, que en menos de dos semanas ha tenido que despedir a dos de sus miembros más cercanos. A pesar de que Francisco llevaba una vida discreta, apartado de la vida pública, su fallecimiento ha despertado un sentimiento de duelo entre sus allegados y personas cercanas al entorno familiar.
El fallecimiento de su hermano hace tan solo unos días
El velatorio tuvo lugar en el Tanatorio de San Isidro, en Madrid, donde se ha oficiado una misa en memoria del aristócrata. Allí se han congregado familiares y amigos para rendirle un último homenaje. Según lo compartido por el entorno más cercano, el acto se ha desarrollado en un ambiente íntimo, centrado en el recuerdo y la despedida de quien ocupaba un lugar destacado en el seno familiar.
Francisco de Borbón había reaparecido públicamente el pasado 11 de mayo durante el funeral de su hermano Alfonso. Aquel día, acompañado por sus tres hijos —Olivia, Cristina y Francisco—, asistió a la ceremonia con un perfil bajo, intentando mantener la privacidad frente a la atención mediática. Su presencia entonces reflejaba el profundo vínculo que lo unía a su hermano, cuya pérdida le afectó especialmente.