Hace justamente un año, más de dos mil refugiados subsaharianos y migrantes intentaron entrar en España por la valla de Melilla. Coincidiendo con esta fecha, Amnistía Internacional y la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) han ofrecido un balance de las víctimas de aquella tragedia: 37 fallecidos y 77 desaparecidos.
Según el informe ofrecido por las dos organizaciones, la cifra de víctimas quintuplica la ofrecida oficialmente por las autoridades de Marruecos. Amnistía Internacional ha lamentado que no se haya producido "una investigación adecuada sobre las denuncias de crímenes de derecho internacional que se cometieron a ambos lados de la frontera".
En su denuncia también han señalado que hay 22 cuerpos sin identificar en una morgue de Marruecos. La investigación realizada, que se ha basado en el testimonio de supervivientes, asegura que hubo personas que murieron durante el traslado en autobús desde la frontera al sur del país. "No recibieron ningún tipo de asistencia médica a pesar de la gravedad de las lesiones", han destacado desde Amnistía Internacional.
"Ningún funcionario, marroquí o español, ha comparecido ante la justicia por las violaciones de derechos que provocaron la muerte, la desaparición y heridas de tantas personas", han concluido.