La Guardia Civil ha localizado la procedencia de las armas de airsoft con las que, autor o autores desconocidos, tirotearon una ambulancia que se encontraba en servicio de urgencias mientras atendía a un paciente en la Plaza Monterrey de Chiclana de Frontera. La ambulancia recibió seis impactos de balines en la puerta trasera izquierda y tuvo que marcharse del lugar rápidamente sin poder identificar a los autores de los hechos, ha explicado en una nota la Guardia Civil.
Como resultado de las investigaciones realizadas se ha intervenido en un bazar de la localidad de Chiclana de la Frontera, la cantidad de 63 armas de aire comprimido de la cuarta categoría, que se encontraban expuestas para la venta al público general. Los hechos tuvieron lugar el pasado 15 de diciembre alrededor de las 22,00 horas cuando el centro de operaciones de la Guardia Civil recibió aviso de un miembro de los servicios de urgencias de Chiclana que informaba de una alteración que se estaba produciendo mientras un paciente, que se encontraba agresivo y en estado de embriaguez, estaba siendo atendido en el interior de la ambulancia en la Plaza Monterrey.
El paciente, que estaba siendo atendido y examinado por encontrarse bajo los efectos de las bebidas alcohólicas, profería, a la vez que recibía, insultos y amenazas por parte de varias personas que se encontraban en el exterior de la ambulancia a modo de espectadores. Durante el transcurso de los hechos la Guardia Civil fue alertada mediante llamada telefónica al centro operativo complejo en el 062, donde un miembro de los servicios de urgencias solicitaba presencia policial por haber recibido el impacto de seis proyectiles de balines utilizados para armas de aire comprimido en el exterior de la ambulancia, concretamente en la puerta trasera izquierda, desconociendo la procedencia y teniendo que marchar rápidamente del lugar.
Por ello, la Guardia Civil ha montado un dispositivo policial desplegando numerosos agentes e intensificando de forma exponencial la vigilancia y presencia policial por las zonas más próximas al lugar donde ocurrieron los hechos. Los agentes de las unidades de seguridad ciudadana realizan constantes controles de personas y vehículos transmitiendo un entorno de seguridad a los residentes de la zona.
Durante las intensificación de seguridad y presencia policial, agentes de la Patrulla de Fiscal y Frontera durante una inspección fiscal en un establecimiento de la zona próxima al lugar de los hechos localizaron, expuestas al público, una cantidad de 63 armas de aire comprimido utilizadas para actividades de airsoft dispuestas para su venta al público general.
Estas armas carecían de todas las autorizaciones necesarias para la venta de éste tipo de productos y de su alta en la intervención de armas y explosivos.
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