Como suele decirse, la Justicia si es lenta, no es Justicia. Una expresión que se inspira en el célebre dicho de Séneca: "Nada se parece tanto a la injusticia como la justicia tardía". Es el caso de un abusador sexual de una menor en Cádiz que, beneficiándose de esa lentitud, verá rebajada la pena después de haber sido condenado.
El condenado por la Audiencia Provincial de Cádiz a tres años de prisión por un delito de abuso sexual a una menor ha visto rebajada su pena en medio año al estimar el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) el recurso de la defensa por dilaciones indebidas.
Según la sentencia, recogida por Europa Press, los hechos se remontan a septiembre de 2016 y la sentencia de la Audiencia a enero de 2022. Como hechos probados se recoge que el condenado se acercó a la menor, de 11 años, a la que conocía por haber estado una vez en su casa, y tras saludarla, le preguntó dónde iba, para a continuación decirle que se subiera a su coche para llevarla a la plaza donde se encontraban sus amigas.
Fue durante el trayecto cuando el condenado aprovechó para cometer el abuso, hasta que llegó a la cita y la menor empezó a golpear los cristales del vehículo, por lo que la dejó salir bajo amenaza de que no dijera nada a su madre porque le haría algo malo.
El condenado, una vez conocida la sentencia de tres años de prisión, presentó recurso por entender que se había vulnerado el principio de presunción de inocencia, así como la falta de aplicación de la atenuante de dilaciones indebidas en la sentencia. Esto último ha sido aceptado por el TSJA que ha rebajado la condena en seis meses, dejándola en dos años y medio.
Como señalan los especialistas, las dilaciones indebidas son "una serie de retrasos en el trámite del proceso, que se evalúan analizando pormenorizadamente la causa y los lapsos de tiempo muerto en la secuencia del proceso". El no resolver la causa en un tiempo razonable se entiende que perjudica al acusado y puede servir de atenuante para su pena, como ha ocurrido en este caso.