Los vecinos de La Marquesa llevan meses denunciando los problemas que le acarrean las obras en el centro de mayores Suite La Marquesa, que está acondicionando su parte trasera con objeto de hacer unas zona ajardinada y un aparcamiento para sus usuarios. "A nosotros no nos molesta que arreglen esto y hagan lo que tengan que hacer, pero llevamos así mucho tiempo y no sabemos nada", confiesa Pedro Garrido, presidente de la asociación vecinal, que lleva denunciando irregularidades en el proceso por parte de Suite La Marquesa y Ayuntamiento de Jerez y que viene acompañado por Sebastián Peña, presidente de la federación de vecinos Solidaridad.
Entre el centro de educación especial La Merced y la gasolinera Galp, Juan García, secretario de la asociación de vecinos La Marquesa, busca el rótulo de una vía pública que desapareció años atrás: la calle Afanas, que ya no tiene acceso por la avenida de Arcos. "Cuando se hizo la gasolinera, casi nos quitaron esta calle, que es fundamental para dar acceso desde la zona residencial de La Marquesa a la avenida, si no tienes que dar toda la vuelta", explica, al tiempo que denuncia una modificación del PGOU meses atrás para adjudicar todos estos terrenos a Suite La Marquesa. "El Ayuntamiento no nos ha dado información sobre esto, pero en el callejero aparece así".
Mientras los vecinos señalan las obras, una monitora pasea por esta misma calle a varios alumnos de este colegio, que utilizan esta vía. "¿Qué iban a hacer estos chiquillos si no les dejan pasar por aquí?", se pregunta mientras señala la puerta de emergencia de la piscina anexa. "¿Y si hay una emergencia en la piscina? Esto no está preparado para ello; esta calle necesitaría estar adecentada".
Restos de basura y un bordillo dificultan el paso mientras que en un lateral una enorme valla separa las obras que están haciéndose en la parte trasera del centro de mayores Suite La Marquesa. Pedro Garrido está seguro de que las obras no cuentan con todos los papeles en regla, ya que la propia asociación solicitó la licencia de obra el pasado otoño, teniendo como respuesta por parte del Ayuntamiento que estaba "en trámite". "Venimos sufriendo en nuestras calles el trasiego de grandes camiones, con bastante tonelaje, desde mayo; hace ya un año, y entonces seguro no había licencia", lamenta. "¿Habéis visto alguna obra de gran envergadura sin un cartel que la especifique? Aquí no lo hay", añade.
Tras haber tenido una reunión con Urbanismo y con los responsables municipales, la junta directiva de la asociación de vecinos La Marquesa lamenta no haber solucionado nada, más allá del cambio de la valla trasera de las obras de Suite La Marquesa en esta parte de la calle Afanas. "Llegaron a poner las vallas hasta el límite, ni se podía pasar, menos mal que las echaron para atrás", comenta Antonio, otro vecino del barrio. Para el presidente vecinal la cuestión más importante es la falta de información y las molestias que se están ocasionando para los vecinos: "Cuando nosotros hacemos una obra en casa, tenemos que pedir un permiso, una licencia y una cuba; en este caso ni sabemos cuándo empezaban las obras, ni cuando terminarán", concluye.
Basuras a todas horas
Por el lateral de Suite La Marquesa, en la calle Afanas de este populoso barrio jerezano, varios contenedores orgánicos y de plástico, son otra de las "pesadillas" de los vecinos, que denuncian que el centro de mayores arroja basuras de todo tipo y a cualquier hora, pese a las continuas quejas depositadas. "Hay un horario para tirar la basura, ellos no lo cumplen y no pasa nada", dice Antonio.
Un hombre, que está pintando una de las casas situadas en frente del centro, nos llama la atención. "Hacen lo que les da la gana, estamos hartos", espeta indignado. "Tiran restos del centro de mayores al orgánico a todas horas, por la mañana, por la tarde y de madrugada; lo he comentado muchísimas veces y nada, no hay forma", dice visiblemente cabreado.
El presidente de la asociación vecinal La Marquesa lo corrobora y abre uno de los contenedores verdes, donde muestra bolsas del centro, en la que dice que hay desde pañales a basuras del diario de la clínica. "¿Un centro como este no puede tener su propia recogida de basuras?", se pregunta el secretario. El vecino, que sigue desde su casa la escena, tiene claro de que el procedimiento no es el correcto: "Esos contenedores deben estar dentro del centro, o que tengan los suyos propios pero que dejen de molestar a los vecinos", concluye.