El juicio que negó a Juana Rivas la custodia de su hijo menor, dándosela en su lugar a su padre, Francesco Arcuri, tendrá que volver a celebrarse. Así lo establece el Tribunal Supremo de Italia, que acepta el recurso presentado por el equipo jurídico de Rivas y anula la sentencia de la Corte de Apelación de Cagliari que establecía la separación de los dos hijos, ya que el mayor vive con ella, en Granada, desde marzo de 2023, cuando obtuvo la custodia definitiva.
En Italia, además, existe un procedimiento penal abierto contra Francesco Arcuri por maltrato hacia sus hijos.
Para el Tribunal Supremo italiano, en el procedimiento judicial que dio lugar a la sentencia que establecía esa separación entre los hermanos se dejaron de aplicar normas internacionales, como el Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra la mujer y la violencia doméstica, según explican los abogados de Juana Rivas en un comunicado. El argumento fundamental es que en dicho proceso faltó un análisis sobre el interés superior de los menores, una cuestión que representa el criterio fundamental en el que deben basarse las decisiones sobre una custodia.
Asimismo, el Tribunal Supremo de Italia también destaca, según informa Público, que la sentencia del tribunal de Cagliari no tiene en cuenta un principio básico como es el de la no separación de los hermanos, que se da en este caso, al haber otorgado la custodia de un hijo al padre y la de otro a la madre. Además, la sentencia también establecía que la madre y el resto de la familia materna solo podían ver al menor en territorio italiano.
Tras determinar la nulidad de esta sentencia, la Justicia italiana reenvía el caso de nuevo a la Corte de Apelación de Cagliari para que se celebre un nuevo juicio y dicte así una nueva sentencia.
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