Un hombre se ha librado de una denuncia por violencia machista tras cambiar de género. De esta forma, los golpes y agresiones que propinó a su pareja quedan tipificados como violencia doméstica, aquella que se ejerce dentro del ámbito familiar y que puede ser llevaba a cabo por cualquier miembro de la familia sin importar si es hombre o mujer, progenitor o hijo.
La historia la ha adelantado El Mundo, que cuenta como los Mossos d'Esquadra no pudieron cursar la denuncia por violencia de género contra el hombre por su cambio en el Registro Civil. Una circunstancia que ni siquiera conocía su víctima. "Quería ponerse ropa interior femenina en momentos íntimos, pero pensé que podía ser fetichismo".
La mujer confiesa que la que era su pareja nunca "ha querido cambiar de sexo". Tras sufrir una agresión que le dejó varios arañazos y heridas en el cuerpo, la sorpresa que se llevó fue mayúscula cuando los agentes le notificaron que no podría contar con protección al no poder considerarse la agresión como violencia machista por el cambio de género que había realizado el hombre cinco meses antes.
Hay que recordar que el Gobierno aprobó a finales del pasado mes de junio el Proyecto de Ley para la Igualdad Real y Efectiva de las Personas Trans y para la Garantía de los derechos de las Personas Lesbianas, Gais, Trans, Bisexuales e Intersexuales (LGTBI )que reconoce la libre autodeterminación de género y elimina el requisito de diagnóstico y tratamiento médico a partir de los 14 años.
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