La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) ha advertido este lunes sobre la evolución del narcotráfico en España, señalando que estas organizaciones han adaptado sus métodos a las nuevas tecnologías y desarrollado complejas formas de introducción de estupefacientes. Según la asociación, este fenómeno ha experimentado un crecimiento exponencial en Andalucía, situación que contrasta con la disminución de efectivos de la Guardia Civil, generando entre los agentes una sensación de “abandono institucional y ministerial”.
Lucas Lavilla, secretario provincial de la AUGC en Huelva, ha explicado que la falta de personal es uno de los principales problemas, especialmente en esta comunidad autónoma, donde faltan miles de guardias. “Esto multiplica las dificultades en la atención a los avisos por alijos de droga, especialmente en provincias como Huelva y Cádiz”, indicó. Según sus cálculos, en España podrían faltar alrededor de 25.000 efectivos, aunque los datos del Ministerio del Interior apuntan a 17.000.
La AUGC ha instado a la adopción de medidas específicas, entre ellas la declaración de zonas de especial singularidad en áreas como Cádiz. Esta figura permitiría una mayor protección penal y la aplicación de los tramos más altos del Código Penal para delitos relacionados con el narcotráfico, incluyendo el denominado “petaqueo” y la colaboración con organizaciones criminales, un aspecto que consideran esencial.
Los representantes de la asociación han denunciado que no se dotan los medios necesarios para enfrentar la situación. Lavilla subrayó que los guardias civiles no cuentan con protocolos claros para actuar frente a alijos de droga o incursiones de embarcaciones, y alertó sobre la falta de reconocimiento de su labor como profesión de riesgo.
Huelva aparece como uno de los principales focos del narcotráfico en Andalucía. Según la AUGC, durante 2025 se han incautado unos 42.000 kilogramos de hachís y 3.200 kilogramos de cocaína en grandes operativos. La asociación también destacó el aumento de armas intervenidas y la intensificación de la violencia de las organizaciones criminales, especialmente para protegerse de robos de droga por parte de otros grupos.
"Profunda y absoluta soledad" en Cádiz
En Cádiz, Víctor Carrasco, secretario provincial de la AUGC, ha descrito una sensación de “profunda y absoluta soledad” entre los agentes, quienes deben adaptarse a delitos cambiantes en un contexto de escasez de personal y recursos. José Manuel Cerezo, responsable del Servicio Marítimo en Almería, advirtió además sobre la obsolescencia de las embarcaciones y la insuficiente formación de los agentes para enfrentar embarcaciones rápidas, lo que limita la capacidad operativa de la Guardia Civil.
Cerezo señaló que la combinación de medios materiales antiguos, tripulaciones reducidas y plantillas con niveles mínimos de hace 25 años, frente a un incremento de las exigencias operativas, genera situaciones de riesgo. En particular, destacó los enfrentamientos con narcolanchas en los que dos agentes deben enfrentarse a tres tripulantes de organizaciones criminales, exponiendo a los guardias civiles a altos niveles de peligro.
