La Policía Nacional ha detenido en Miranda de Ebro (Burgos) a tres menores de edad por su presunta implicación en dos graves delitos cometidos en los últimos meses: un intento de homicidio contra un indigente y el incendio de un puesto ambulante durante las fiestas locales. La Fiscalía de Menores de Burgos ya ha decretado su ingreso en un centro de menores.
El primer suceso se registró en la madrugada del 22 de abril, en torno a las 00:40 horas, en la estación de autobuses de Miranda de Ebro. Un hombre sin hogar que pernoctaba habitualmente en la zona fue víctima de un ataque incendiario mientras dormía.
Según su testimonio, dos jóvenes se acercaron al lugar y, minutos después, arrojaron sobre él una caja de cartón en llamas, preparada previamente con papeles y rociada con líquido inflamable.
Un testigo corroboró que los agresores manipularon el cartón, lo prendieron y lo lanzaron directamente sobre la víctima. Aunque el hombre perdió su saco de dormir y su manta, logró salir ileso y no sufrió heridas graves.
Los menores, lejos de ocultar la acción, la grabaron en vídeo mientras reían y se burlaban del indigente. Este hecho llevó a los investigadores a imputarles un delito de homicidio en grado de tentativa, con la agravante de odio por aporofobia (odio hacia las personas sin recursos).
También incendiaron un puesto ambulante en junio
El segundo ataque se produjo semanas después, durante las fiestas de San Juan del Monte, en la madrugada del 9 de junio de 2025. En torno a las 04:00 horas, un puesto ambulante resultó completamente calcinado tras un incendio intencionado.
La propietaria, una mujer de origen peruano, denunció que estaba durmiendo en su furgoneta, estacionada frente al negocio, cuando escuchó ruidos y vio que su puesto estaba ardiendo. Otros vendedores intentaron sofocar las llamas, pero el fuego se propagó con rapidez, poniendo en riesgo la vida de quienes dormían cerca.
Gracias a la rápida intervención de la Policía Nacional y de los bomberos, se evitaron daños personales. No obstante, las pérdidas económicas superan los 35.000 euros.
En este caso, los agresores también grabaron los instantes previos al incendio, pronunciando frases como "vamos a quemar unos panchos" y "vamos a matarlos", lo que refuerza la hipótesis policial de un delito de odio por motivos racistas. Además, días antes, una comerciante de un puesto cercano denunció haber recibido amenazas con tintes xenófobos.
Fiscalía ordena el ingreso en un centro de menores
Las investigaciones, llevadas a cabo por la Brigada Local de Policía Judicial, permitieron identificar y detener a los tres menores implicados en ambos sucesos.
Finalmente, la Fiscalía de Menores de Burgos instruyó las diligencias y determinó su inmediato ingreso en un centro de menores, dada la gravedad de los hechos y la reincidencia en las conductas violentas.
Con estas actuaciones, la Policía Nacional da por resueltos dos de los episodios más graves registrados en Miranda de Ebro en los últimos meses, que han generado gran alarma social por la brutalidad de los ataques y la condición de vulnerabilidad de las víctimas.