El juez Adolfo Carretero ha propuesto juzgar a Iñigo Errejón por presuntas agresiones sexuales contra la actriz Elisa Mouliaá, según el auto equivalente al procesamiento. El magistrado considera que existen indicios suficientes para que los hechos sean investigados en un juicio, al estimar que podrían haberse producido actos con contenido sexual sin el consentimiento de la víctima.
En el documento judicial, Carretero describe tres episodios distintos que habrían implicado a Errejón en un delito de agresiones sexuales. La actriz presentó denuncia por estos hechos, detallando que ocurrieron en escenarios diferentes. El primero se habría producido en el ascensor de la casa de unos amigos a la que acudieron tras la presentación de un libro de Errejón. Posteriormente, los presuntos actos se habrían repetido en el domicilio de esos amigos y, finalmente, en un taxi que trasladaba a Mouliaá a su propia vivienda.
El juez se refiere a estos episodios en plural, subrayando que cada uno constituiría un delito independiente. La propuesta de juzgar al exdirigente de Sumar implica que el caso avance a la fase de juicio, donde se determinará la veracidad de las acusaciones y la responsabilidad del acusado.
Rechazo de la conciliación
Recientemente, la actriz Elisa Mouliaá ha rechazado participar en el acto de conciliación solicitado por el exdiputado Íñigo Errejón, quien le reclamaba una retractación tras acusarle públicamente de un supuesto delito de extorsión relacionado con dos testigos presenciales de la causa en la que se investiga a Errejón por agresión sexual, además de exigirle una indemnización de 10.000 euros. La conciliación, prevista para las 10.00 horas del 31 de octubre en el Juzgado de Primera Instancia Número 67 de Madrid, no contó con la comparecencia de Mouliaá ni de ningún representante legal, por lo que se declaró fallida, allanando el camino para que el exdiputado presente la querella, según indicaron fuentes jurídicas a Europa Press.
La demanda de conciliación hacía referencia a las declaraciones de los testigos Borja y Soraya, organizadores de la fiesta donde presuntamente se produjo la agresión, el pasado 20 de junio. Según el escrito, Mouliaá difundió en su cuenta de la red social X (antes Twitter) mensajes en los que atribuía falsamente a Errejón un delito de extorsión para influir en los testimonios de los testigos. Entre los mensajes recogidos, la actriz señalaba que Errejón se había negado a entregar su teléfono porque había extorsionado a los testigos, lo que motivó la reclamación legal por parte del exdiputado.
