Humberto empezó a hacer deporte con 30 años. Durante su juventud pesaba unos 95 kilos y llegó un día que se planteó que no se quería “ver así toda la vida”. Y empezó a correr. Un año después estaba compitiendo en los 101 kilómetros de la Legión, una prueba que discurre por la Serranía de Ronda. “No tengo término medio”, confiesa Humberto Otero, un ultraman jerezano que lleva desde 2015 realizando pruebas físicas con fines solidarios. “No recuerdo cuántas he hecho, la verdad”, señala este auxiliar de enfermería que trabaja en el Hospital de Jerez. Precisamente su último reto irá destinado a menores con leucemia ingresados en este centro hospitalario.
Un niño, una sonrisa, una ilusión, un juguete se llama la campaña impulsada por Humberto Otero, en colaboración con el gimnasio Córner 4, donde entrena, unas instalaciones que celebran su décimo aniversario con esta iniciativa, que pasa por recorrer 1.900 metros a nado, 90 kilómetros en bicicleta y 21 kilómetros corriendo, un medio ironman indoor, explica Humberto, que realiza a lo largo de la mañana del jueves. “Espero tardar seis horas”, cuenta a lavozdelsur.es cuando lo visita, “porque ayer estuve catorce horas de guardia en el hospital y salí a las diez de la noche”.
La idea de Humberto, con este nuevo reto solidario, es que los pequeños ingresados en el servicio de Hematología Infantil del Hospital de Jerez cuenten con juguetes durante esta Navidad. Para ello, el gimnasio Córner 4 recoge los juguetes hasta el 30 de noviembre. “Me propusieron que hiciera algo por su aniversario y como teníamos pendiente la recogida de regalos, pues me decidí por esto”, cuenta Humberto Otero. “Lo mejor llega cuando le ves la cara a los niños que llevan todo el año luchando con la enfermedad y que ese día desbordan ilusión”, agrega.
Humberto, en un momento del medio 'ironman' para recoger juguetes para niños con leucemia. FOTO: MANU GARCÍA
“Si la gente se supera en solidaridad llevaremos juguetes a más niños que el año pasado”, señala el ultraman jerezano, que acompañará a Papá Noel el próximo 16 de diciembre durante la entrega de los juguetes en el Hospital, a menores con una edad comprendida entre los meses de vida y los 16 años. La Federación Local de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (Flampa) también recoge juguetes para la causa, “se está volcando”, reconoce Humberto mientras sigue pedaleando en la bici estática.
El ultraman entrena entre cinco y seis días a la semana, "dependiendo de la jornada laboral que me toque", explica, pero casi todos los días nada, monta en bici, corre o se ejercita en el gimnasio. Su entrenador personal, David Márquez Waltrapa, un conocido ironman de El Puerto, le plantea los entrenamientos de forma semanal, "pero luego lo tengo que consensuar con la familia", señala Otero, que conoció al padre de Waltrapa mientras estaba trabajando en el Hospital de Jerez, algo que le cambió la vida. "Él lleva desde pequeño haciendo ironman y para mí es una motivación total entrenar a su lado", apunta Humberto.
Un detalle de la camiseta de Humberto Otero. FOTO: MANU GARCÍA
"Me motiva gente de la provincia, que están cerca, porque he corrido con ellos y me animan a seguir adelante", señala el ultraman sin dejar de pedalear. ¿Cual será su siguiente reto? Para el Día Internacional del Cáncer Infantil, que se celebra el 15 de febrero, tiene previsto recorrer la distancia de una maratón en la pasarela del Hospital de Jerez. "La tendré que subir 235 veces", dice, "intentaremos que vaya mucha gente y me acompañen a subir y bajar varias veces. Va a ser algo vistoso".
Con su asociación Cambiar vidas haciendo deporte no para de hacer retos solidarios, entre tres y cinco cada año. En 2020 cumplirá un lustro y quiere organizar algo especial. "Pero en exterior, que parezco un hámster siempre indoor", dice entre risas. Su ilusión, confiesa, es competir en la Madrid-Lisboa Non Stop, una prueba que consiste en recorrer en mountain bike los 800 kilómetros que separan las capitales española y portuguesa. "Es muy duro, pero a ver si podemos formar un equipo", señala.
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