Los centros escolares ya se preparan para la vuelta a las clases presenciales, en plena segunda ola de brotes del virus y con las madres y padres asustados por la situación que se puede vivir en el interior de las clases. ¿Qué decisiones tomarán los centros? ¿Cómo se relacionarán los alumnos entre ellos? ¿Cómo será el acceso? ¿Qué medidas de prevención habrá? Hay colegios, como el CEIP Miguel de Cervantes de Jerez, que ha publicado en su web un primer borrador del protocolo a seguir durante el curso.
Antes de la apertura del CEIP Miguel de Cervantes, está prevista la “desinfección total del espacio donde se realiza la actividad docente, así como la zona de administración y el resto de las distintas zonas del edificio —salón de usos múltiples, biblioteca, sala de profesores, pasillos, cuartos de baño, etc—“. Los pasillos estarán señalizados con los recorridos recomendados, así como las aulas, baños y secretaría. Cada aula tendrá gel desinfectante, como también los baños.
El centro contará con un aula para la ubicación de posibles casos Covid identificados en horario escolar —con gel, mascarillas, papelera de pedal y bolsas de basura—. Las madres y padres tendrán que tomar la temperatura a los alumnos antes de salir de casa —“concienciando a las familias de dicha medida preventiva antes de exponer al alumnado a cualquier contacto fuera del hogar”, recoge el borrador—, y deben avisar si hay contagiados en el entorno familiar del niño y no llevarlo si presenta síntomas.
¿Qué hacer cuando haya sospechas de contagios? “Cuando un alumno o alumna inicie síntomas o estos sean detectados por personal del centro durante la jornada escolar, se llevarán a un espacio, estancia o habitación separado, con normalidad sin estigmatizarla”, recoge el borrador del protocolo. “Se le facilitará una mascarilla quirúrgica para el alumno/a y otra para la persona adulta que cuide de él/ella hasta que lleguen sus familiares o tutores. Será una sala para uso individual, elegida previamente, que cuente con ventilación adecuada, dispensador de solución hidroalcohólica y con una papelera de pedal con bolsa”.
“El coordinador referente Covid —continúa el documento— se pondrá en contacto con el referente sanitario y le facilitará los datos identificativos del alumno o alumna afectada; se contactará con la familia o tutores legales del alumno/a para que acudan al centro para su recogida, debiendo quedar en su domicilio en aislamiento hasta que el referente sanitario realice contacto telefónico”. Los trabajadores del centro que tengan síntomas deberán “retirarse a un espacio separado y se pondrán una mascarilla quirúrgica; contactarán de inmediato con su centro de salud, o con el teléfono habilitado para ello, o con la correspondiente Unidad de Prevención de Riesgos Laborales, debiendo abandonar, en todo caso, su puesto de trabajo hasta su valoración medica”.
Los casos confirmados tienen un protocolo diferente. En ese caso, la dirección del centro contactará con la delegación territorial de Salud. “El personal del centro docente deberá observar en todo momento el tratamiento confidencial de la identidad y datos de los caso sean sospechosos o confirmados; el referente sanitario será quien comunique al coordinador covid-19 del centro la existencia de uno o varios casos confirmados, previamente habrá comunicado esta circunstancia al Servicio de epidemiología del distrito sanitario en el que se ubique el centro; el referente sanitario intervendrá en la realización de encuestas y rastreo de contactos coordinados con Epidemiología; el centro deberá disponer de un listado de los alumnos y de los docentes que hayan tenido contacto con los alumnos de ese aula, así como la forma de ese contacto”.
Cuando haya un caso confirmado de un alumno en horario escolar, se contactará con las familias del alumnado de la misma clase, “para que con normalidad y de forma escalonada, procedan a recogerlos, manteniendo las medidas de protección (mascarilla y distanciamiento físico), informando que deben iniciar un período de cuarentena, sin menoscabo que desde Atención Primaria de Salud contactarán con cada uno de ellos”. Si se detecta fuera del horario escolar, “procederá a contactar con las familias de los alumnos de la misma clase, para que no acudan al centro docente, informando que deben iniciar un período de cuarentena”.
Los profesores que confirmen su positivo deberán abandonar el centro e iniciar un aislamiento domiciliario, y si imparte clase en diferentes aulas se realizará una evaluación individualizada por parte de la unidad de prevención de riesgos laborales en colaboración con Epidemiología de Salud Pública. “Ante dos o más casos confirmados en una misma aula: se considerarán contactos estrechos además de todos los alumnos y docente principal de la misma, también al resto de profesores que hayan impartido en el aula. Ante tres o más casos confirmados en el plazo de 14 días, en al menos dos aulas, se requerirá de los servicios de epidemiología una valoración específica respecto a la totalidad del centro o servicio docente”, recoge el borrador.
El borrador del protocolo de actuación del CEIP Miguel de Cervantes también incluye medidas para limitar contactos en el centro escolar. “Con carácter general, se procurará una distancia de al menos 1,5 metros en las interacciones entre las personas en el centro educativo; en todos los cursos del centro (excepto en los dos primeros) superamos la veintena en el alumnado, por lo que no será posible mantener la distancia de seguridad en las aulas, or lo que hemos decido tomar la opción de formar grupos de convivencia”.
Estos grupos de convivencia se relacionarán entre ellos de modo estable, “pudiendo socializar y jugar entre sí, sin tener que garantizar la distancia de seguridad. Estos grupos, en la medida de lo posible, reducirán las interacciones con otros grupos del centro educativo, limitando al máximo su número de contactos con otros miembros del centro”. Además, “utilizarán una o varias aulas de referencia donde desarrollarán, siempre que sea posible y las características de las materias y asignaturas así lo permitan, toda su actividad lectiva, siendo los docentes, quienes se desplacen por el centro”. “El alumnado permanecerá en su aula y en el recreo sólo podrá tener contacto con su grupo, dentro de un área determinada”.
Durante las entradas y salidas del centro se deberán respetar las distancias de seguridad entre las familias, “por tanto no deben agolparse en las puertas de entradas al centro”. Cada alumno sólo puede ir acompañado de un adulto, se debe guardar un “riguroso” orden de llegada, exigiendo puntualidad “para evitar contactos no previstos y romper así el protocolo de seguridad”. “Cinco minutos después del tiempo marcado para las entradas se cerrarán todos los accesos al centro y la entrada no podrá efectuarse hasta las 10:00, 11:00 o 12:00 horas, abriéndose una ventana de acceso de cinco minutos, por la puerta principal del centro”, agrega el documento.
Los alumnos, en el interior del centro, deberán evitar los pasillos y estar fuera de las aulas lo máximo posible. “Nunca se abandonará el aula si no es con autorización de su maestro”, especifica. “Entrarán y saldrán con distancia suficiente para evitar tocarse y empujarse”. El documento señala que “las familias o tutores, en horario lectivo, sólo podrán acceder al centro previa cita o por ser demandado por algún docente por causa de fuerza mayor”. El centro pedirá al Ayuntamiento la presencia de la Policía Local, tanto a las horas de entradas y salidas para “ayudar el flujo de las personas y que se respeten las normas establecidas”.
El protocolo de actuación ante el covid del CEIP Miguel de Cervantes se puede leer pinchando aquí.
Comentarios