El cardenal Amigo Vallejo ya descansa en la Catedral de Sevilla tras dedicar su vida a "hacer el bien"

El templo metropolitano acogía así la misa exequial en el Altar del Jubileo, antes de la inhumación de los restos del cardenal emérito de Sevilla en la Capilla de San Pablo

Imagen del último adiós al cardena Amigo en una abarrotada Catedral de Sevilla.
Imagen del último adiós al cardena Amigo en una abarrotada Catedral de Sevilla.

La Catedral de Sevilla ha acogido este sábado el funeral por el cardenal emérito de la Archidiócesis hispalense Carlos Amigo Vallejo, que fallecía el pasado miércoles en Guadalajara a los 87 años de edad, como consecuencia de una insuficiencia cardiaca tras haber empeorado su estado de salud días después de haberse sometido a una intervención quirúrgica; una ceremonia marcada por los reconocimientos al prelado, con especial mención a su "entrega sin límites" y a una trayectoria dedicada a "hacer el bien con su palabra, sus gestos, con su vida entera".

El templo metropolitano acogía así la misa exequial en el Altar del Jubileo, antes de la inhumación de los restos del cardenal emérito de Sevilla en la Capilla de San Pablo, que se encuentra entre la Capilla Real y la Puerta de Campanillas, con una gran representación de la Iglesia.

Entre las autoridades religiosas se encontraban el nuncio Apostólico en España, Bernardito Auza; además del arzobispo emérito de Sevilla Juan José Asenjo, los obispos de Málaga; Jesús Catalá; de Córdoba, Demetrio Fernández; de Cádiz-Ceuta, Rafael Zornoza; de Huelva, Santiago Gómez Sierra; de Asidonia-Jerez, José Rico Pavés; de Granada, Francisco Javier Martínez, y de Guadix, Jesús Orozco; el cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares; el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro; el arzobispo de Barcelona, el cardenal Juan José Omella; el arzobispo de Tanger (Marruecos), Santiago Agrelo, y el arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz, entre otros.

También figuraban los cardenales Aquilino Bocos y Miguel Ángel Ayuso; el obispo emérito de Humahuaca (Argentina) Pedro María Olmedo; el Superior Provincial de los Franciscanos de la Provincia de Santiago --la de Fray Carlos--, Juan Manuel Bujá, y el Superior General de los Padres Mercedarios Descalzos, Agustín Devesa; entre otras personalidades eclesiásticas.

Autoridades eclesiásticas y civiles

Entre las múltiples autoridades civiles destacaban el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno; el alcalde de Sevilla, Antonio Muñoz; el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos; otros miembros del Gobierno andaluz como el presidente Juan Manuel Moreno o la consejera de Cultura, Patricia del Pozo; o el delegado del Gobierno de la Junta en la provincia, Ricardo Sánchez; y numerosos miembros de la Corporación local hispalense, entre otras muchas figuras de la sociedad civil.

El funeral ha estado presidido por el arzobispo de Sevilla, José Ángel Saiz Meneses, quien ha repasado la prolija trayectoria vital y eclesiástica de Carlos Amigo Vallejo, defendiendo que "sus trabajos pastorales" le hacen merecedor de "la corona perenne de la gloria", pues "consagró su vida a anunciar el Evangelio de Cristo", dejándolo "todo por seguir la llamada" de Dios, cuyo "amor ha ido transitando su vida".

La vida de Carlos Amigo Vallejo, según José Ángel Saiz Meneses, constituye toda una "peregrinación de fe", destacando especialmente sus 28 años al frente de la Archidiócesis de Sevilla, donde accedió a "todos los ámbitos y estructuras" y a "todos los corazones" y donde "se entregó con generosidad a las hermandades" de la sociedad hispalense.

No en vano, como ha recordado, Carlos Amigo Vallejo fue distinguido como hijo predilecto de Andalucía y también de la provincia de Sevilla, así como hijo adoptivo de la ciudad hispalense, entre otros reconocimientos.

"Entrega sin límites"

Destacando que Carlos Amigo Vallejo siempre hizo gala de una gran "capacidad de trabajo y una entrega sin límites", Saiz Meneses ha descrito su trayectoria y su pontificio hablando de "inteligencia, cultura, pedagogía, entrega, formación, oración y una profunda actitud de acogida". "Era un hombre espiritual y a la vez muy cercano, humano y misericordioso", ha enfatizado el actual arzobispo de Sevilla.

Del mismo modo, el arzobispo de Sevilla ha manifestado que el cardenal emérito era una persona que, especialmente, "sabía escuchar y esperar" y siempre "buscaba la concordia" en todos los ámbitos. Precisamente por eso, ha manifestado que durante su "intenso" pontificio, Carlos Amigo Vallejo siempre "tendió puentes" en lo eclesiástico, lo institucional y lo social. "Su palabra era amable y siempre tenía sonrisa pronta para todos", ha remarcado Saiz Meneses.

"Desde la unión con Cristo, pasó haciendo el bien con su palabra, sus gestos, con su vida entera", ha resumido Saiz Meneses respecto a Carlos Amigo Vallejo, que mediante esta ceremonia ha recibido un "último adiós de gratitud y reconocimiento" tras toda una "vida sacerdotal al servicios de Dios y de la Iglesia", en palabras de Saiz Meneses.

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