El Juzgado de lo Penal número seis de Sevilla ha resuelto finalmente mediante un acuerdo de conformidad entre las partes, el juicio promovido contra cinco jóvenes adultos acusados de agredir y robar a un grupo de jóvenes en el barrio hispalense de Nervión el pasado mes de mayo, dos de los cuales estaban en prisión provisional a la espera de la celebración de esta vista oral. Unas agresiones "inmisericordes y crueles" que formaron parte de un macabro reto viral denominado caza al pijo.
El juicio estaba inicialmente previsto para el pasado 7 de septiembre, pero dicha jornada la vista fue suspendida y fijada nuevamente para este lunes. El abogado Antonio Miguel Cubero, que representa a la acusación particular, explicaba a los medios de comunicación que la vista oral fue suspendida porque uno de los encartados privados de libertad había arrojado un resultado positivo en la prueba de coronavirus Covid-19, derivando ello en su aislamiento hasta que superase la enfermedad.
Además de este procedimiento judicial, por cierto, un Juzgado de Menores habrá de someter a juicio a dos jóvenes de menos de 18 años de edad encausados también por estos mismos hechos.
El abogado Antonio Miguel Cubero explicaba igualmente que como acusación particular, solicitaba cinco años de cárcel para cada uno de los acusados adultos de este procedimiento judicial, por presuntos delitos de robos con violencia, así como multas por delitos de lesiones y también multas por dos delitos menores. Según el abogado, los acusados serían presuntamente autores de una "agresión indiscriminada e inmisericorde", perpetrada con "ensañamiento y crueldad".
Ya este lunes, según ha informado a Europa Press el citado abogado, el juicio ha quedado resuelto mediante un acuerdo de conformidad entre las partes, gracias al cual los cinco acusados han reconocido la autoría de los hechos y han aceptado una condena a dos años y ocho meses de cárcel cuatro de ellos y dos años de prisión el quinto, así como multas para todos ellos y medidas de alejamiento que implican la prohibición de acercarse o comunicarse con el principal perjudicado durante cinco años.
Como ha publicado ABC, "la juez ha estimado la agravante de abuso de superioridad en los cinco acusados, pero también dos atenuantes en todos ellos, como son el consumo de drogas y reparación del daño, pues han consignado ya la indemnización a la víctima: 3.915 euros".
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