La revisión de precio de mayo para la bombona de butano, que bajó, ha sido la última en la que se ha aplicado la norma estatal que limitaba el precio máximo de la misma a los 19,55 euros. Según ha informado la OCU, esto significa que “a partir de ahora ya no contaremos con esa herramienta que limitaba el precio de un bien de primera necesidad, especialmente consumido por algunos consumidores vulnerables”.
La bombona naranja, la más popular y vendida, ha experimentado una subida de más del 15% en apenas 4 meses. La organización de consumidores matiza que la contención del precio máximo afecta a la unidad estándar de 12,5 kilogramos de carga, la más usada en España. El dato que facilita la OCU es que 53 de los 68 millones de bombonas que se consumen son de este tipo.
El precio ahora es de 16,14 euros. OCU explica que fue en 2015 cuando se puso en marcha este sistema de fijación del precio tope, “desde entonces la tarifa ha sufrido variaciones en poco tiempo, si bien los precios tendían a subir en invierno y bajar durante el verano”, detalla la organización.
Así las cosas, será en julio cuando se compruebe el coste de la bombona sin esa herramienta activa. La OCU advierte que la nueva situación no tendrá en cuenta la ausencia de déficit o superávit de tarifa que enjugar.
La Organización de Consumidores y Usuarios concluye su informe señalando que “el ciclo de precios del butano debería ayudar a que los costes descendieran, pero estamos en una situación muy volátil”, por lo que hacer una previsión resulta imposible.