Cada vez son más las grandes tiendas que han implementado un sistema que recorta en trabajadores y trabajadoras presentes en estos establecimientos, un sistema que ahorra importantes cantidades en nóminas. Una 'moda' que lleva introduciéndose desde hace unos años, y que no deja de generar polémica.
Lefties es una de estas tiendas que han implementado el sistema de autopago en caja que hace trabajar a los clientes. La tienda de ropa con descuentos de Inditex, propiedad del multimillonario gallego Amancio Ortega, mantiene este método en su tienda del centro comercial Lagoh, en Sevilla.
Estas últimas semanas de campaña de Navidad y ahora de rebajas de enero, la empresa ha ahorrado en empleados, ya que apenas tienen algunas personas disponibles para cambios de prendas en una de las tiendas más grandes del citado centro comercial, que es a su vez una de las superficies con más clientela de la provincia de Sevilla.
Este sábado, en medio de las citadas rebajas, solo funcionaban tres de las cajas de autopago, similar al de Decathlon, en la que hay que colocar las prendas en una especie de caja que reconoce automáticamente las prendas escogidas. Además, hay que retirar las alarmas que las prendas llevan consigo.
Uno de los 'riesgos' del sistema de autopago es que, al no haber una supervisión completa y exhaustiva, se abre la puerta a que algunos clientes deshonestos no incluyan en el ticket todas las prendas que se llevan. Un riesgo que Inditex está dispuesto a asumir, parece, a cambio de otros ahorros en gasto de personal.


