El Gobierno ha aprobado un anteproyecto de Ley del Mercado de Tabacos y Otros Productos Relacionados que mantiene en vilo al sector del vapeo en España. La entrada en vigor de este marco regulador definido por el Ministerio de Hacienda supondría, entre otras cosas, que la venta de cigarrillos electrónicos y de "dispositivos de tabaco novedosos" se realicen exclusivamente en los estancos y en un plazo de cinco años.
La tienda de vapeo como Vapori.es dejaría de existir con este control que también busca revisar la publicidad o evitar su venta en Internet y a menores. Si esta propuesta sale adelante, todos los líquidos y vapeadores serán tratados como si fueran productos del tabaco y serán comercializados en los estancos.
Por tanto, con la nueva ley, tendría un tratamiento diferente que implica la aplicación de impuestos y el pertinente aumento de del precio final. Algo que no sería beneficioso para los consumidores, pero sí para los fondos del Estado, del que dependen los estancos.
Ante esta situación, el sector del vapeo ha estallado y ha mostrado su rechazo a las pretensiones del Gobierno. La Unión de Promotores y Empresarios del Vapeo (UPEV) considera que esta legislación "quiere trasladar un sector completo a otro que tiene el monopolio del tabaco" y advierte de que "será la desaparición".
Para ellos, este paso perfudica directamente a la empresas de vapeo, favoreciendo a las tabacaleras. Por ello, sostienen que el anteproyecto es contrario a la libre competencia y dejaría a muchas personas en el paro ya que, el vapeo aporta unos 1.200 puestos de trabajo directos y 1.800 indirectos en España según UPEV.
Actualmente, la mayoría de los clientes de vapeadores, que se calcula que son unos 500.000, adquieren sus productos en los cerca de 400 establecimientos especializados repartidos por España, negocios que generan alrededor de 60 millones de euros anuales. Si estos clausuran, pasarían a ser nuevos clientes de los estancos, algo que los trabajadores del sector no ven con buenos ojos.
Los planes del Gobierno han movilizado no solo a los empleados sino también a los usuarios de cigarrillos electrónicos. La Asociación Española de Usuarios de Vaporizadores Personales (ANESVAP) ha presentado un libro recopilatorio de 1.500 testimonios de vapeadores que cuentan como el vapeo les ha ayudado a dejar de fumar.
La iniciativa, llamada El Vapeo Salva Vidas, pretende dar voz a las más de 500.000 personas que han dejado el tabaco gracias al vapeo. Para esta asociación, los vapeadores son los grandes olvidados e ignorados en los planes de Sanidad. Por tanto, ha inciado una campaña de recogida de firmas que presentarán al Ministerio de Sanidad, al Congreso de los diputados y al Senado con el objetivo de que el vapeo sea considerado como una herramienta para dejar el tabaco convencional.
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