La mayoría de las comunidades gobernadas por el PP han decidido plantar cara al Ministerio de Sanidad y no enviarán los datos sobre los cribados de cáncer que les reclamó la ministra Mónica García tras los fallos detectados en el programa de Andalucía. Argumentan que esos planes son competencia exclusiva de las autonomías y que la solicitud responde, aseguran, a una “confrontación política”.
Mónica García respondió con dureza a través de sus redes sociales, denunciando que “maniobra política es ocultarle los datos de cribados de cáncer a la ciudadanía amén de una confesión explícita de que no son buenos datos”. Aseguró además que los gobiernos del PP “no le ocultan la información al Ministerio, se la ocultan a los y las ciudadanas”.
La carta tipo que las comunidades populares están enviando al Ministerio, según las fuentes consultadas, mantiene un contenido casi idéntico, aunque con matices regionales. En la suya, la consejera madrileña Fátima Matute afirma que Madrid no participará en una iniciativa que, lejos de mejorar los programas, “parece responder únicamente a una estrategia de confrontación política”.
Fuentes autonómicas y del PP han explicado a EFE que las regiones populares consensuaron una misiva conjunta dirigida a la ministra para justificar su negativa. En ella, rechazan facilitar los datos sobre los cribados de mama, colon y cérvix de los últimos cinco años, tal como Sanidad hizo días antes con Andalucía.
Desde Andalucía, primera comunidad en recibir la solicitud, la postura es la siguiente: según fuentes de su Consejería de Salud, el Gobierno andaluz no se negará a entregar los datos, aunque pide un marco común. En su carta, el consejero Antonio Sanz propone convocar un Consejo Interterritorial extraordinario para debatir la situación del Sistema Nacional de Salud (SNS).
Sanz solicita definir los criterios técnicos para remitir la información, ya que los 22 indicadores del programa nacional de cribado están “en revisión, debido a las dificultades manifestadas por varias comunidades”. Reitera además la disposición de Andalucía a colaborar con Sanidad, “con el objetivo real de la mejora asistencial” y sin caer en una “utilización partidista” de la salud pública.
Reacciones en otras regiones
Otras comunidades, como Valencia o Murcia, también se alinean con la negativa, porque consideran que la iniciativa de Sanidad “busca distraer la atención” de sus propios fallos y critican la ausencia de un sistema informático que permita unificar los datos. Mientras tanto, Galicia y Baleares han confirmado haber recibido la petición, aunque aún no han respondido. En cambio, el Gobierno de Canarias, liderado por Coalición Canaria y el PP, sí enviará la información solicitada. Desde La Rioja, se recuerda que su consejería ha colaborado históricamente en todas las iniciativas relacionadas con la prevención y la salud pública, siempre desde el consenso y con el propósito de mejorar la atención ciudadana.
