La consejera de Salud, Rocío Hernández, se ha visto obligada este martes a dar explicaciones tras la polémica por los retrasos en el programa de detección precoz del cáncer de mama, un asunto que ya ha llegado a la Fiscalía a instancias de la asociación Defensor del Paciente.
La consejera Rocío Hernández ha defendido este martes la eficacia del plan, al que cada año se invita a más de medio millón de mujeres en la comunidad. “El del cribado del cáncer de mama es un programa muy eficaz para el diagnóstico temprano. En Andalucía invitamos a más de medio millón de mujeres y, de enero a agosto, se han detectado 1.700 casos”, señaló durante un acto de vacunación infantil.
La titular de Salud reconoció que le habría gustado que la asociación hubiera trasladado antes la información a la Junta en lugar de acudir directamente a la Fiscalía. “Nosotros necesitamos conocer la información”, insistió. Según detalló, hasta el momento la Consejería tiene constancia de cuatro casos afectados por retrasos en la comunicación, por lo que pidió “disculpas” y aseguró que haber conocido antes los detalles habría permitido “empezar ya a detectar dónde está el problema”.
Hernández explicó que desde el departamento se trabaja con los datos recibidos “que nos sirven para mejorar”. El origen de las demoras podría estar en una “limitación detectada en el circuito que ha afectado a la accesibilidad de manera puntual”.
La denuncia en Fiscalía
El Defensor del Paciente ha solicitado a la Fiscalía del TSJA que investigue al Servicio Andaluz de Salud (SAS) por una supuesta dejación de funciones dentro del programa de cribado. Según la entidad, los retrasos en pruebas diagnósticas programadas han puesto en riesgo a las mujeres afectadas, con la posibilidad de que la enfermedad se agrave o se extienda.
La consejera, no obstante, ha reiterado que este plan “salva vidas” y que constituye una herramienta esencial para la detección temprana del cáncer de mama en Andalucía.



