El PP y su regreso al pasado: renovación del núcleo duro sin caras nuevas

El Partido Popular mira a etapas anteriores y reivindica las figuras de Fraga, Aznar y Rajoy para ensanchar sus bases; aumenta la presencia del PP andaluz, Pablo Casado renuncia a seguir en política y Ayuso marca terreno

Feijóo saludando a Moreno en el congreso del PP.
Feijóo saludando a Moreno en el congreso del PP.

Como cuando un entrenador intenta algo nuevo pero no le sale bien y tiene que volver a lo que le había funcionado anteriormente. Un poco así se resume la primera jornada del congreso nacional del Partido Popular celebrada en Sevilla. La renovación con Alberto Núñez Feijóo no ha resultado otra cosa que tirar de la vieja guardia del partido. Con caras más que conocidas. Alguna, incluso, desgastada.

El mejor ejemplo ha sido la presidenta del congreso, Teófila Martínez. Un rostro que, tras 30 años en política, es de todo menos renovador. Lo mismo ocurre con el organizador, Esteban González Pons, actualmente eurodiputado, pero con cargo público desde 1993. Elías Bendodo, que ha sido nombrado número tres de la formación, también lleva desde el 2000 con cargo público. Cuca Gamarra, nueva secretaria general, lleva menos, pero ha sido la portavoz del partido en el Congreso durante los últimos años y ha sido la encargada de justificar el pacto con Vox en Castilla y León, "garantiza la gobernabilidad y la estabilidad". Tampoco es una cara nueva.

Además, la primera fila de Fibes estaba completada con Javier Arenas o Fátima Báñez. Otros rostros contrastados. En el centro, Mariano Rajoy, el expresidente, que ha vuelto a desatar las carcajadas del público cual monologuista o, mejor aún, cual romancero. Estaba previsto que José María Aznar también estuviera, pero el covid lo ha impedido. Aun así, hay intervenido telemáticamente. Por si todo esto fuera una mirada al futuro que no convenciera, durante el día se han sucedido las referencias a Manuel Fraga en modo de homenaje.

Feijóo iniciaba su discurso diciendo que siempre que hay un momento importante, el PP tiene que acudir a Andalucía, "aunque he de decir que siempre ha habido un gallego presente". El presidente de Galicia también agradecía a la ciudad que permitiera el evento durante el mismo fin de semana en el que se celebra el pregón de Semana Santa, uno de los actos más importantes de la ciudad. Por si alguien no lo sabía, Feijóo es gallego. Él se ha encargado de repetirlo cada dos frases. Hasta ha tenido algunas frases en galego, "una de las lenguas cooficiales de España" porque las lenguas "no se combaten, se respetan". Alguno ha podido tener sarpullidos. Volviendo al pasado, en una mirada retrospectiva, ha presumido de lo que ha aprendido con diferentes miembros del PP, incluidos Aznar, Rajoy... y Casado. "No he venido a insultar ni a crispar", comentaba.

Feijóo, Gamarra y Bendodo estarán acompañados de José Antonio Monago en el comité de derechos y garantías - otra cara nueva -, Diego Calvo, del PP de A Coruña, en el comité electoral. El resto serán anunciados este domingo. En otros órganos, mucho peso andaluz con la presencia de la secretaria general, Loles López, el excandidato a la Alcaldía de Sevilla, Beltrán Pérez, o el vicepresidente del PP de Sevilla y alcalde de Carmona, Juan Ávila. Estos dos últimos cercanos a Moreno Bonilla, aunque ambos cayeron derrotados en sus respectivas pugnas con José Luis Sanz y Virginia Pérez.

"Qué buena tierra Galicia, qué buenos líderes dais", decía el anfitrión Juan Manuel Moreno, que tampoco ha estado falto de piropos, para referirse a Fraga, Rajoy y Feijóo. Siempre y cuando hablara únicamente del periodo democrático. Hay que pensar que sí. Todo el que se subía al escenario hablaba del "Gobierno del cambio". Feijóo hasta le daba la alternativa como decano de los barones autonómicos. Moreno respondía al auditorio invitando a los presentes a quedarse en Sevilla hasta el domingo para "consumir". Alegría, que estamos en primavera.

Antes, ya se había hecho público el nombramiento de la mano derecha de Moreno, Elías Bendodo, como coordinador general. El PP andaluz gana fuerza dentro del partido. Habrá que ver si esto no lo debilita fuera. Las primeras palabras del consejero de la Presidencia han sido claras, "el Partido Popular ya se pone en modo Andalucía" para unas elecciones "inminentes".

De todo lo dicho, lo más repetido ha sido la bajada de impuestos. De hecho, en la primera intervención que ha tenido, Feijóo lo ha puesto como modelo de buena gestión. Y el fortalecimiento de los servicios públicos. A ver cómo se hace. "Es posible bajar impuesto, es obligatorio mejorar los servicios públicos y hay que cuadrar las cuentas públicas".

Tras ambos ha sido el turno de la gran estrella del Partido Popular, Isabel Díaz Ayuso, que ha intervenido en un congreso que es la respuesta a una crisis "que nunca debió existir". A partir de ahí ha cambiado el tono de las intervenciones. Han aparecido los comunistas y ha dejado claro que "nosotros no somos burócratas socialistas". Por supuesto, España por encima de todo. Pluralidad sí, pero sin pasarnos. Hay que respetar la historia.

Aznar en su cita enterraba a Casado antes de tiempo. El que en ese momento era todavía presidente veía la intervención donde le habían dicho, es decir, fuera de las primeras filas, "es lo que tiene estar en funciones", ha manifestado en su turno. El expresidente del Gobierno lo saludaba con un "donde quiera que esté". Luego ha pedido generosidad, ambición y responsabilidad para ensanchar la base de la formación.

Más entretenida han sido las palabras de Rajoy, donde tampoco han faltado las críticas al Gobierno actual. Ni a su partido. El expresidente ha comenzado diciendo que las "diferencias se solucionan con voluntad de acuerdo y lealtad" y que la unidad es responsabilidad de todos. Con el público en el bolsillo a través de chascarrillos, ha comenzado a reivindicar sus dos legislaturas dirigiendo el país. Empezando por el 155, al que responsabiliza de la paz social actual en Cataluña. Ha pedido un gobierno de adultos y ha arremetido contra la fragmentación parlamentaria de "populistas, bisagristas y chantajistas. El PP es el único con un gran discurso nacional".

Quién sabe si semejante cabrero era por estar perdiéndose el sorteo del Mundial. Hemos aprendido que el "todas, todos y todes" saca de sus casillas a Rajoy. También que "no necesitamos 22 ministerios para estropear las cosas cuando las habíamos arreglado con 13", que hay que ser austero y que este Gobierno es imprevisible y no es fiable. Su despedida ha sido como su llegada, con el chiste correspondiente, "no sé si se ha nombrado al equipo, pero tiene buena pinta". No, no se había nombrado.

El discurso de Casado parecía más de aterrizaje que de despegue. Pero era un adiós con ciertos recados. Su mes ha sido "agridulce" y ha querido dejar claro que siempre "he dicho la verdad, costara lo que costara, me enfrentara a quien me enfrentara". Se enfrenba a Aysuo y le ha costado su carrera política, aunque Rajoy ha hecho un intento de que lo rescaten, "no hay que prescindir de nadie, no nos sobra nadie". El resto de Casado ha sido la exposición de un programa que ya no es cosa suya y que, durante su mandato, ha fracasado. De hecho, según ha manifestado, Feijóo ha intentado contar con él, pero el que hasta este viernes ha sido presidente del PP ha anunciado que deja la política.

Sobre el autor:

Emilio Cabrera.

Emilio Cabrera

Periodista.

...saber más sobre el autor

Si has llegado hasta aquí y te gusta nuestro trabajo, apoya lavozdelsur.es, periodismo libre, independiente y en andaluz.

Comentarios

No hay comentarios ¿Te animas?

Lo más leído