El Parlamento de Andalucía ha continuado este jueves con debates económicos tras el cara a cara de Juanma Moreno con los portavoces de los grupos en la mañana. La condonación de la deuda planteada por el Gobierno central y la reforma del sistema de financiación autonómica han sido dos mociones que han unido y separado a PP y PSOE, que están jugando desde hace semanas a un choque de posturas para plantarse batalla mutuamente. Y en esa estrategia, el PSOE finalmente ha apoyado la propuesta de mejora de la financiación que presentaba el PP.
Por los socialistas, el portavoz Rafael Recio instaba a la Junta a aceptar la condonación de hasta 18.791 millones de euros de deuda, lo que permitiría reducir en casi la mitad el endeudamiento autonómico y ahorrar unos 1.400 millones en intereses en 10 años. Fue rechazada con los votos de PP-A y Vox.
Recio acusó al presidente andaluz, Juanma Moreno, de actuar con “hipocresía y cinismo”, asegurando que su negativa a la quita responde únicamente a “intereses partidistas” y a su “obediencia a Génova antes que a Andalucía”. Para los socialistas, se trata de una “oportunidad histórica” que no supone un regalo, sino “justicia”, porque “cada euro ahorrado en intereses es un euro más para hospitales, colegios o residencias”.
En la otra orilla, el PP-A defendió con firmeza que la prioridad no debe ser la condonación, sino una financiación justa y estable, en línea de los 1.528 millones anuales de infrafinanciación según el cálculo de la Junta. El secretario general del partido en Andalucía, Antonio Repullo, insistió en que el Estado mantiene una deuda histórica con la comunidad de 10.500 millones de euros, lo que obliga a que “cada euro sea más elástico que en otros territorios” para sostener servicios básicos.
Repullo advirtió de que la quita es “una trampa”, ya que no aportaría 18.000 millones a las arcas andaluzas, sino apenas un ahorro de 140 millones en intereses. “Con esa operación no se construyen hospitales ni se contrata personal sanitario. Con una financiación justa, sí”, subrayó, acusando al Ejecutivo de Pedro Sánchez de privilegiar a Cataluña mediante pactos con el independentismo.
En esta línea, el diputado popular Pablo Venzal recordó que la actual vicepresidenta del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, defendía cuando era consejera en la Junta que no se podía “sustituir el debate de financiación por una condonación de deuda”.
Finalmente, el Parlamento andaluz aprobó en su totalidad la iniciativa del PP-A para exigir una reforma urgente del modelo de financiación autonómica. El texto defiende que el nuevo sistema debe basarse en los principios de igualdad, equidad y solidaridad, tener en cuenta las particularidades socioeconómicas de Andalucía y garantizar servicios públicos de calidad.
