El Foro Económico Mundial acaba de publicar el Informe de Riesgos Globales 2023 (The Global Risks Report 2023). Este documento analiza los principales riesgos a nivel internacional con carácter anual.
Por "riesgo global" se entiende la posibilidad de ocurrencia de un acontecimiento o condición que, en caso de producirse, afectaría negativamente a una proporción significativa del producto interior bruto, la población o los recursos naturales. Bajo esta definición se agrupan 32 factores de índole política, social económica, tecnológica y medioambiental.
El último Informe sobre Riesgos Globales del Foro Económico Mundial identifica los principales riesgos a los que se enfrentará el mundo en la próxima década. En el caso de España, estos son: “una rápida y/o sostenida inflación; una crisis de deuda; el coste de la vida; la crisis de empleo y vivienda; fricción geopolítica por los recursos; y la proliferación de actividad ilícita económica”.
En los próximos dos años, la crisis del coste de la vida se considera el mayor riesgo, mientras que en los próximos 10 años dominan los riesgos medioambientales. La interconexión de los riesgos y crisis mundiales está dando lugar a la amenaza de multiples crisis en los próximos años
Con estos parámetros, el Informe de Riesgos Globales 2023 articula un estudio para el corto plazo (dos años) y el largo plazo (con horizonte de diez años). En el corto plazo, los riesgos globales que muestran una mayor severidad son el coste de la vida; los desastres naturales y los episodios de meteorología extrema; la confrontación geoeconómica; el fallo en mitigar el cambio climático; la erosión de la cohesión social y la polarización social; los incidentes dañinos medioambientales de gran escala; el fallo en la adaptación al cambio climático; la ciber-inseguridad y el cibercrimen; las crisis de recursos naturales; y, por último, la migración involuntaria a gran escala.
El fallo en mitigar el cambio climático
En cuanto al largo plazo (10 años), en los primeros del ranking aparecen los riesgos globales de índole predominantemente medioambiental, como son el fallo en mitigar el cambio climático, el fallo en la adaptación al cambio climático, los desastres naturales y los episodios de meteorología extrema; el colapso de los ecosistemas y la pérdida de la biodiversidad.
“Con esta clasificación se puede apreciar cómo los efectos socioeconómicos derivados de la invasión ilegal de Ucrania, tales como el suministro energético, el coste de la vida y la subida generalizada de precios, se encuentran entre las principales preocupaciones actuales. Sin embargo, a largo plazo, el cambio climático se muestra como la principal amenaza a nivel mundial, de acuerdo a la opinión de los expertos consultados para la elaboración del informe”.
La confrontación geoeconómica es un factor que subyace en esta coyuntura de gran incertidumbre global. Las sanciones económicas, la guerra arancelaria y las políticas proteccionistas son factores que se manifiestan de forma paralela a una mayor confrontación geopolítica, donde las asimetrías en las relaciones de interdependencia es empleada como elemento de influencia, a lo que también contribuyen las campañas de desinformación. "Se trata de un agente que erosiona la confianza en procesos clave en las sociedades democráticas, dado que permite propagar mensajes de corte radical y extremista a través de redes sociales".
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