La Junta de Andalucía ha presentado este miércoles nuevas ayudas para agroindustrias, que está preparando la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, tras la publicación de sus bases reguladoras en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) el pasado 30 de septiembre de 2025.
Esta línea de subvenciones, dirigida tanto a pymes como a grandes empresas dedicadas a la transformación, comercialización y desarrollo de productos agrícolas y alimentarios, tiene como destinatarias a las compañías que desarrollan su actividad en Andalucía.
El programa contará con un presupuesto total de 88 millones de euros, financiados por la Junta de Andalucía, el Gobierno de España y la Unión Europea a través del Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader). Estas ayudas se enmarcan en el Plan Estratégico de la Política Agraria Común (Pepac) 2023-2027, y de la cuantía total, 22 millones de euros —el 25%— se reservarán al sector hortofrutícola.
Con esta convocatoria, el Gobierno andaluz señala que busca potenciar la competitividad y sostenibilidad de las empresas agroalimentarias, ayudándolas a conquistar nuevos mercados y ampliar su base de consumidores. Además, la medida pretende mejorar la gestión de los procesos productivos, reducir costes, e incrementar la seguridad y el valor añadido de los alimentos y bebidas elaborados en la comunidad.
Las ayudas cubrirán inversiones diversas, como la construcción, adquisición y mejora de bienes inmuebles de carácter productivo, la compra e instalación de maquinaria y equipos, o la adquisición y desarrollo de programas informáticos, patentes, licencias y marcas registradas. También se incluirán costes generales de los proyectos, como los honorarios de arquitectos, ingenieros y consultores, así como la contratación de servicios externos y de certificación relacionados con la implantación de sistemas de gestión de la calidad.
Gracias a estos incentivos, las agroindustrias andaluzas podrán adaptarse mejor a las tendencias del mercado actual, modernizar tecnológicamente sus procesos y mejorar la presentación de sus productos. Al mismo tiempo, la Junta de Andalucía confía en que estas ayudas impulsen procesos de integración empresarial y cooperativa, la diversificación de la oferta y la creación de nuevos productos, así como la eficiencia energética y la reducción del impacto ambiental en toda la cadena de producción.