La Junta ha dado a conocer los datos del primer concurso abierto y permanente (CAP) en la estructura de la administración andaluza, convocado en junio de 2025, un proceso que marca un antes y un después en la gestión del empleo público andaluz. En total, 1.906 funcionarios han accedido a puestos de base y estructurales en todas las consejerías, dentro de un modelo de promoción interna que busca agilizar los procesos, estabilizar las plantillas y potenciar la carrera profesional de los empleados públicos. Los adjudicatarios tomarán posesión de sus nuevos puestos el 1 de noviembre.
La convocatoria, simultánea en toda la Junta de Andalucía, se publicó el 3 de junio de 2025 y ofrecía 3.256 plazas vacantes: 993 de puestos base y 2.263 estructurales. Estas plazas estaban distribuidas entre todas las consejerías, además de organismos como la Agencia de la Competencia, el Servicio Andaluz de Salud (SAS), la Agencia de la Dependencia, el Consejo Consultivo, el Consejo Audiovisual y el de la Transparencia.
El interés fue masivo: 6.529 funcionarios presentaron un total de 30.794 solicitudes, ya que el 60% optó a varias plazas. El plazo finalizó el 23 de junio de 2025 y, por primera vez, se utilizó un procedimiento automatizado de baremación mediante la aplicación SIRhUS (Sistema de Información de Recursos Humanos de la Junta de Andalucía), en colaboración con la Agencia Digital de Andalucía (ADA).
Gracias a este sistema, el proceso fue mucho más ágil. El 3 de septiembre se publicaron en el BOJA los listados provisionales con los 1.906 adjudicatarios. Tras analizar 3.487 alegaciones en tiempo récord, las comisiones de valoración resolvieron la adjudicación definitiva el 30 de septiembre de 2025, y los listados finales se publicaron en el BOJA del 6 de octubre
Este primer CAP ha sido una convocatoria excepcional, al tratarse de la primera vez que se pone en marcha este modelo de provisión de puestos. A partir de ahora, el concurso se celebrará mediante una convocatoria única anual, vigente todo el año, en la que cada consejería podrá ofrecer plazas vacantes al menos tres veces al año, con un plazo máximo de resolución de cuatro meses. Cada departamento gestionará así los puestos de sus servicios centrales, delegaciones territoriales y agencias.
Para participar, los funcionarios deben haber permanecido al menos dos años en su puesto actual y, tras obtener uno nuevo, deberán mantenerse otros dos años antes de volver a concursar. De esta manera, se garantiza una mayor estabilidad en las plantillas y un mejor servicio público. Además, los puestos adjudicados serán irrenunciables, salvo en casos excepcionales regulados por normativa.


