Mayoría abrumadora (625 a favor por 628 votos emitidos) para fulminar como vicepresidenta del Parlamento Europeo a la socialdemócrata griega Eva Kaili por el escándalo de corrupción conocido como el Qatargate, por el que presuntamente cobró sobornos del país catarí.
Kaili, de 44 años, es una de las cuatro personas a las que un juez belga decidió este pasado domingo mantener bajo arresto e imputar por el delito de participación en organización criminal, blanqueo de capitales y corrupción.
El sábado Kaili ya perdió sus funciones, pero este pasado martes el Pleno del Parlamento Europeo la ha destituido. También ha sido expulsada de su partido, el Pasok griego, y de su grupo, el de los socialdemócratas (S&D).
La ya ex eurodiputada llegó a defender en la Cámara europea que Qatar en una "referencia" en derechos laborales, después de que las obras de construcción de los estadios del Mundial hayan dejado un censo insoportables de obreros muertos —unos 6.500 se estima; Qatar solo reconoce la muerte de unos 400—. Pero es que, además, su pareja y su padre, que fue pillado huyendo con bolsas de dinero, también han sido imputados por un caso que puede ir a más.
A la espera de que comparezca este miércoles ante el tribunal, la Policía belga, han informado diversas agencias, ha realizado una veintena de registros, principalmente en despachos de la sede del Parlamento Europeo en Bruselas, aunque también en el domicilio de varios eurodiputados.
En la residencia de Kaili las autoridades han intervenido unos 600.000 euros en efectivo, hallaron "varios cientos de miles de euros" en la maleta del padre de la socialista griega en un hotel de la capital europea y otros 150.000 euros en el alojamiento de una tercera persona.
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