El presidente ruso, Vladímir Putin, lanzó este martes una advertencia contundente a Europa al asegurar que, "si quiere guerra”, Rusia está preparada para combatir. La declaración llegó horas antes de su reunión en el Kremlin con Steve Witkoff, enviado especial de la Casa Blanca, en un contexto de creciente tensión diplomática.
En vísperas del encuentro con los representantes estadounidenses, el mandatario adoptó un tono duro hacia las potencias europeas, a las que acusó de “poner trabas” al plan de paz impulsado por Donald Trump. Según su versión, Europa estaría obstaculizando una propuesta negociada “a dos bandas” entre Washington, Moscú y Kiev. “Ellos mismos se abstienen de las negociaciones de paz y, al mismo tiempo, ponen trabas al presidente Trump”, afirmó.
Rechazo frontal a las iniciativas europeas
Putin desestimó de forma tajante las propuestas de la Unión Europea para la paz en Ucrania y arremetió contra Francia, Alemania y Reino Unido por su contrapropuesta al plan estadounidense. Según denunció, esos países plantean exigencias “absolutamente inadmisibles”, entre ellas garantías militares para Kiev y negociaciones basadas en las líneas actuales del frente. “Ellos lo entienden y así culpan a Rusia de rechazar ese proceso de paz. Ese es su objetivo. Lo vemos con claridad”, aseguró.
El líder ruso insistió en que Europa “no es Ucrania”, defendiendo que las operaciones militares en el país vecino se desarrollan “de manera quirúrgica”, pese a que Kiev y gobiernos occidentales rechazan por completo esa afirmación. Señaló además que “esta no es una guerra en el sentido moderno del término”, y advirtió que, si Europa inicia un conflicto directo, podría desencadenarse una situación en la que “no habrá nadie con quien llegar a un acuerdo”.
En el mismo foro, Putin volvió a negar que Rusia tenga intención de atacar países europeos, reiterando que “no tenemos intención de atacar Europa. Lo he dicho cientos de veces”. Sin embargo, a continuación reforzó su mensaje más polémico: “Si Europa de repente quiere combatir y lo hace, nosotros estamos listos ahora mismo. En esto no debe haber ninguna duda”.
El presidente ruso insistió en que Europa no puede vivir “en la ilusión” de lograr una “derrota estratégica” de Rusia, sosteniendo que las potencias occidentales “están a favor de la guerra”. Las declaraciones, realizadas antes de su reunión con el emisario estadounidense, elevan de nuevo la tensión internacional en un escenario marcado por el estancamiento diplomático y la ausencia de avances en las negociaciones de paz.


