Manuel tiene cuatro años, habla muy poco y tiene diagnosticada una discapacidad. “Yo vengo todos los días a cambiarle los pañales a la hora del recreo”, dice Yumara Santiago de los Reyes en la puerta del CEIP Torresoto al que su pequeño asiste sin tener los mismos derechos que los demás. Él es uno de los 10 alumnos con necesidades especiales (NEAE) que requieren un monitor, PTIS, durante las cinco horas lectivas en este centro.
Solo una persona para una decena. Casos distintos. “Aunque vengamos a cambiarles el pañal y hagamos una pequeña parte, no podemos sustituir la figura del PTIS. Ellos no solo les acompañan al baño, se encargan de su alimentación, de trasladarlos de una clase a otra, son su apoyo psicológico y su integración para que puedan seguir el ritmo”, dice Guadalupe, madre de una niña de tres años.
Ella también ha alzado la voz en una mañana lluviosa en la que el Personal Técnico de Integración Social, la Flampa de Jerez en colaboración con Codapa, el sindicato de enseñanza Ustea, y las Ampas de los colegios Blas Infante, Poeta Carlos Álvarez y Torresoto, han unido sus fuerzas. Una vez más, denuncian la situación a la que se enfrentan no solo las familias, sin acceso a este recurso, sino también los trabajadores, entre orientadores, monitores, Intérpretes de Lenguaje de Signos (ILSE), pedagogos.
Precariedad laboral en un servicio externalizado que la Agencia Pública Andaluza de Educación (APAE) no vigila, y que acaba perjudicando a los más vulnerables, los niños. Llevan más de dos semanas de huelga y movilizaciones para revertir esta “grave situación”. No hay personal necesario para el alumnado y la falta de recursos humanos y materiales hace que la educación pública no sea de calidad para ellos.
Pancartas en mano y globos azules destacan en la entrada de este colegio que lleva desde el inicio del curso sin un orientador que realice el seguimiento del alumnado NEAE. “Estamos en diciembre, y las familias nos encontramos en una situación insostenible, ya que no disponemos de ningún tipo de apoyo. Es una situación alarmante”, sostiene Guadalupe rodeada de micros y paraguas.
La madre denuncia que los pequeños “están desatendidos”. Según explica, hay madres que no están llevando a sus hijos al colegio, otras lo hacen una parte de la mañana y, otras, “con todo el dolor de su corazón, lo traen la jornada completa porque no tienen más remedio. Es algo muy injusto, porque no hay derecho a que no tengan derecho a estar igual que todos sus compañeros”.
Guadalupe critica que la Junta de Andalucía se base en números a la hora de asignar PTIS y asegura que, en la práctica, no todos los alumnos tienen la misma necesidad. “Hay algunos que necesitan poco tiempo y otros, prácticamente la totalidad del tiempo en el cole. Deberían valorar cada caso uno a uno para ver cuántos PTIS son realmente necesarios. Nosotros tenemos que compartir, o está en Infantil o está en Primaria y una de las dos partes se queda desatendida porque no hay más”, expone.
Son años de denuncia los que lleva este colectivo luchando por mejorar sus condiciones laborales. La Junta de Personal Docente ha exigido hasta la saciedad a la Delegación y a la Consejería de Educación el aumento de inversión en atención a la diversidad. “Es el talón de Aquiles de todo el sistema educativo. Y no solamente hay mucho alumnado que está sin atender, sino que queda todavía por diagnosticar. Es raro el centro donde no se quejan de que el personal que atiende este alumnado está totalmente a tope, que ya no pueden más”, manifiesta Juan José Ruiz, responsable de organización de Ustea Cádiz.
En la concentración, denuncia que los recursos se reparten “con cuentagotas” dando lugar a PTIS que trabajan en dos colegios al mismo tiempo. “No hay un mínimo de profesorado para cada centro. Lo urgente es que se den cuenta de que hace falta una inversión para que aumente la plantilla”, añade.
Piden una solución “cuanto antes” a la Consejería de Educación. Pero no hay respuestas por parte de la Junta. En la última reunión con la Administración, estuvo presente Víctor Pulido, secretario del comité de empresa de los PTIS de Cádiz, de CCOO.
“Nos dicen que están estudiando las peticiones, hemos cobrado un tercio del salario de noviembre, la Junta utiliza la agonía de los trabajadores para alargar la solución”, lamenta. Víctor reivindica unos derechos laborales mínimos.
“Vienen unas empresas y nos explotan y nos pagan por debajo de tablas salariales, nos quitan vacaciones y no nos reconocen trienios”, sostiene el sindicalista, que comenta que esta situación ha destapado “las desvergüenzas” de la Junta en cuanto a la atención al alumnado NEAE.
“No es la suficiente. La Junta vende que el alumnado está atendido, pero estamos viendo cómo las familias se están levantando para exigirlo. Es una doble lucha”, añade Víctor.
Una escuela pública inclusiva. “Se está impidiendo el acceso a la educación al alumnado más vulnerable”. Quiero ir a clase como tú es el lema de la campaña de Codapa, que demanda aumentar las plantillas para una atención plena.
La huelga indefinida convocada por CCOO continúa su curso, desde el pasado 21 de noviembre, con un respaldo del 100% de la plantilla de la provincia de Cádiz. Así, hay prevista una nueva concentración ante las puertas de la sede de la Delegación del Gobierno de Andalucía en la provincia de Cádiz, este martes 5 de diciembre, a partir de las 11.00 horas. Por su parte, CGT comunicó la suspensión temporal del paro, que inició el día 14, después de que la consejería de Desarrollo Educativo convocase una reunión para este lunes. De esta forma, si la Junta no adopta medidas, el paro se retomará a partir del 12 de diciembre.
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