El presidente de Hostelería de España, José Luis Álvarez Almeida, ha advertido este martes de las posibles repercusiones económicas que podría tener en el sector la reducción de la jornada laboral a 37 horas y media semanales. Según sus estimaciones, la aplicación de esta medida supondría un incremento de costes laborales de entre el 6 y el 9 %, un impacto que, a su juicio, acabaría asumiendo la sociedad en su conjunto.
Durante su intervención en Málaga, en el marco de la asamblea general de la asociación Mahos, el representante del sector hostelero ha matizado que la postura de la federación no se basa en una negativa categórica a la medida. No obstante, ha planteado dudas sobre su viabilidad en el contexto actual del sector, marcado por una fuerte creación de empleo y problemas derivados de las bajas por incapacidad temporal.
Álvarez Almeida ha señalado que la reducción de la jornada obligaría a los negocios a cerrar durante el tiempo restante, lo que conllevaría una pérdida directa en términos de facturación y rentabilidad. Como alternativa, ha indicado que la contratación de nuevo personal implicaría un aumento considerable en los costes laborales.
Rechaza la reforma
El presidente de la patronal ha reiterado que esos costes adicionales no recaerían únicamente sobre los empresarios ni sobre los trabajadores, sino que se distribuirían entre el conjunto de la sociedad. En este sentido, ha cuestionado si el país está preparado para asumir una carga económica de esas características derivada de un cambio en la legislación laboral.
Por último, la federación ha pedido al Gobierno que mantenga una actitud de diálogo respecto a esta reforma. Consideran que, siendo España un país líder en el ámbito turístico a nivel mundial, cualquier medida que afecte negativamente a este sector podría tener consecuencias para el conjunto de la economía.


