“No sé qué hacer, he agotado mis prestaciones y dedico todos los días mi tiempo a eso que llaman búsqueda activa de empleo ¿Qué quieres que te cuente? Soy lo que llaman aquí un PLD, un parado de larga duración”. Hay silencio en la oficina del Servicio Andaluz de Empleo, unos miran de reojo, otros bajan la voz y la mayoría intenta adoptar una imagen de confianza en que pronto saldrán de la situación en la que se encuentran.
Las posibilidades de encontrar empleo se reducen cuando aumenta el tiempo de permanencia como demandante. El mayor volumen de paro se registra entre quienes llevan demandando empleo más de doce meses. Además, seis de cada diez parados del colectivo presentan una antigüedad de la demanda superior a los dos años.
El drama es total según los datos publicados por el INE y relativos al segundo trimestre de 2022. En Andalucía contamos con 371.700 trabajadores que llevan más de un año buscando empleo sin haber sido capaces de acceder a un puesto de trabajo en el que desarrollar su labor. De ellos, casi el 70% (68,63%) llevan en esta situación dos años o más.
El paro, un drama nacional
En un informe elaborado por el servicio de estudios de UGT Andalucía se señala que 27 de cada 100 parados de larga duración del conjunto del Estado se encuentran en Andalucía ya que, según la misma fuente estadística, el número total de parados de larga duración en España asciende a 1.395.500 trabajadores.
En términos de evolución reciente, estos 371.700 parados andaluces de larga duración suponen un descenso del 4,59% con respecto a los 389.600 registrados en el primer trimestre del año, así como una reducción del 15,73% si la comparativa la llevamos a cabo en términos interanuales, es decir, con los 441.100 trabajadores andaluces de larga duración que manteníamos en el segundo trimestre de 2021.
“A pesar de lo positivo de los descensos, es de destacar que ambos son inferiores a los logrados por el conjunto del Estado ya que, trimestralmente han descendido un 7,23% y, en términos interanuales, un 19,60%”, señala el sindicato.
UGT-A apuesta por la implementación en Andalucía de planes municipales contra el desempleo de larga duración que permitan un enfoque plural y centrado en los desempleados pertenecientes a este colectivo, “que estén perfectamente adaptados a las particularidades de cada territorio, permitiendo el desarrollo de nuevos programas y que propicie la acción coordinada entre las diferentes administraciones con competencias en la materia de empleo”, así como el trabajo consensuado con los agentes sociales y representantes de la sociedad civil que trabajen en la solución de los problemas específicos de este grupo de desempleados
La mitad de los desempleados andaluces
Ocho comunidades autónomas superan el porcentaje nacional de paro de larga duración (62,45 %), siendo la Comunidad Valenciana la que presenta el valor más elevado, el 72,18 %. Illes Balears es la única que presenta una proporción por debajo del 50 %. Las provincias con las cifras más bajas en cuanto a porcentaje de parados de larga duración y que no superan el 50 % son: Soria, Huelva, Segovia y las islas Baleares. Por el contrario, las que tienen los valores más altos y que superan el 70 % son: Alicante, Valencia y Castellón.
“En términos relativos, cuestión fundamental para hacernos una idea de la magnitud del problema, en Andalucía este drama afecta a casi la mitad de nuestros desempleados, el 49,4%, porcentaje que supera en 1,6 puntos la media estatal (47,8%). A pesar de lo desmesurado del dato, ha descendido casi un punto con respecto al primer trimestre del año (50,2%) y prácticamente un punto y medio con respecto al mismo trimestre de 2021 (50,8%)”.
Un grave perjuicio para las mujeres
Finalmente, en lo que a esta “foto actual” se refiere, UGT-A cree importante descender un nivel de desagregación “y comprobar cómo se reparten nuestros desempleados de larga duración por sexos”.
Se constata que es una cuestión que vuelve a suponer un grave perjuicio para las trabajadoras andaluzas ya que el 61% de este colectivo de desempleados son mujeres. Concretamente, según las cifras publicadas por el INE, en Andalucía se registran 226.900 desempleadas de larga duración y 144.900 desempleados, el 39% restante.
Pero no solo las mujeres son mayoría en el seno del colectivo de trabajadores en paro de larga duración, sino que además sufren en mayor medida los efectos negativos que provocan los periodos de crisis económicas.
“En este sentido, es llamativo el acelerado ritmo de crecimiento del desempleo femenino de larga duración registrado tras la aparición de la covid-19, pasando de 160.600 desempleadas en el segundo trimestre de 2020 a 256.600 justo un año después, en el segundo trimestre de 2021. Es decir, en apenas doce meses las desempleadas andaluzas de larga duración aumentaron en 96.000 trabajadoras. En el mismo periodo de tiempo, el paro masculino de larga duración se vio incrementado en 65.800 trabajadores”, apunta el informe.
Es decir, en apenas doce meses las desempleadas andaluzas de larga duración aumentaron en 96.000 trabajadoras. En el mismo periodo de tiempo, el paro masculino de larga duración se vio incrementado en 65.800 trabajadores.
“Esta negativa particularidad se constata también para los periodos de crecimiento económico. Mientras que entre los segundos trimestres de 2021 y 2022 hemos visto reducido el desempleo masculino de larga duración en 39.600 trabajadores, en el caso femenino, este colectivo solo se ha visto minorado en 29.600 trabajadoras. Todo ello ha provocado que la brecha entre ambos colectivos se sitúa ahora en unos niveles de récord, ya que esas 82.000 mujeres más desempleadas de larga duración suponen la cifra más elevada de las últimas dos décadas”, apunta UGT.
España, con más parados de larga duración en Europa
“Aunque es cierto que este tipo de desempleo afecta, de manera generalizada, al conjunto de Europa, igualmente cierto es que este nivel de afectación varía mucho de unos países a otros”. España (41,7%) se encuentra entre los países con un mayor porcentaje de parados de larga duración de entre el total de sus desempleados. Tanto es así que se sitúa casi dos puntos y medio por encima de la media de la UE27 (39,2%) y solo por debajo de seis de los países europeos: Grecia (62,3%), Italia (56,8%), Eslovaquia (56,6%), Bulgaria (49,4%), Serbia (44,7%) y Portugal (43,3%).
“Más ilustrativa resulta la comparativa si descendemos un escalón en términos geográficos y comparamos a Andalucía (41,1%) con el resto de regiones europeas. De esta forma, constatamos que nos situamos en el segundo bloque de regiones europeas con mayor problemática de paro de larga duración. Nuestros datos, también referidos a 2021, son similares a los registrados en territorios como Creta (41,1%) en Grecia , Emilia Romaña (41,1%) en Italia, Maribor (41,4%) en Eslovenia o Coímbra (40,8%) en Portugal”, reseña el informe.
Otro análisis que demuestra la gravedad del paro de larga duración en Andalucía (49,4%) es el comparativo con respecto al resto de comunidades autónomas. Si continuamos midiendo el paro de larga duración como el porcentaje que el mismo representa entre el conjunto de los parados de un territorio (EPA 2T 2022) comprobamos como solo el Principado de Asturias (50,7%), donde más de la mitad de sus desempleados lo son de larga duración, se sitúa por encima de Andalucía.
“Si nos centramos en el colectivo de trabajadores que atraviesa la situación más dramática, los parados de muy larga duración, la situación es igualmente negativa para Andalucía (33,9%) ya que, en este caso, ocupamos el tercer escalón en el ranking de comunidades, por detrás de, nuevamente, el Principado de Asturias (43,6%), junto con la Región de Murcia (35,2%)”. En el lado opuesto, encontramos a Aragón y Cantabria (ambas 19,4%), donde este tipo de desempleo afecta a menos de una quinta parte de sus desempleados.
Comentarios