El Ministerio de Defensa es el gran beneficiado de la enorme apuesta, de 9.000 millones de euros, que está haciendo el Gobierno de España por Airbus según los datos que, en distintos departamentos y en especial el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, ha recabado lavozdelsur.es. De hecho, las ministras Margarita Robles (Defensa) y Reyes Maroto (Industria), ocupan un papel destacado en todas las negociaciones que mantiene el presidente. La segunda cesará en breve para iniciar su campaña como candidata del PSOE a la alcaldía de Madrid.
En el Ejecutivo siguen muy atentamente el desencuentro entre los sindicatos y la dirección de la compañía aeroespacial, que se volverán a reunir este viernes 18 en Madrid para analizar la propuesta económica que formulará Airbus. Un día antes se han convocado asambleas en los ocho centros de producción en España donde trabajan 12.700 personas. Precisamente Sevilla acogerá entre los días 22 y 23 de noviembre una cumbre profesional para debatir sobre el nuevo papel de la industria española aeroespacial y de defensa en el marco de la Unión Europea.
El Space & Defense Industry Sevilla Summit, evento sobre la industria espacial y de defensa y las tecnologías asociadas, se celebrará bajo el título ‘Espacio, Seguridad y Defensa: capacidades industriales y tecnológicas’. “Nos encontramos ante un nuevo escenario global surgido del primer conflicto bélico en Europa tras la Segunda Guerra Mundial, a raíz de la invasión de Ucrania por parte de Rusia. Estamos, por tanto, ante una coyuntura, donde lo prioritario para la industria española aeroespacial, de seguridad y defensa es participar al más alto nivel posible en los grandes proyectos comunes europeos”, señalan desde el Ayuntamiento de Sevilla.
España quiere duplicar su gasto militar en "los próximos años", según el presidente Pedro Sánchez. Actualmente, el país invierte poco más de un 1% de su PIB en defensa, más de 12.200 millones de euros. La aportación de España entre 2021 y 2024 representa el 5,99% del total de los países miembros. Los presupuestos y programas de la OTAN rondan los 2.500 millones de euros según explican en su página web. En cuatro décadas de convivencia, España ha participado en 22 misiones de la OTAN con 125.000 efectivos de las fuerzas armadas.
La OTAN se financia a través de las contribuciones directas e indirectas de sus miembros. Los fondos comunes de la Alianza son contribuciones directas a presupuestos, capacidades y programas colectivos, que equivalen a solo el 0,3% del gasto total de defensa de los aliados (2.500 millones de euros por año hasta 2022) para desarrollar capacidades y administrar la totalidad de la organización, y sus comandos, capacidades e infraestructura militares.
#ConferenciaDePrensa 📍Space and Defense Industry Sevilla Summit
— Space & Defense Industry Sevilla Summit (@SpaceAndEconomy) November 11, 2022
📍 Espacio, Seguridad y Defensa: capacidades industriales y tecnológicas.#SaveTheDate https://t.co/oAsRoi6Nz3#Sevilla, 22 y 23 de noviembre de 2022
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Un sector en auge
El sector de espacio, seguridad y defensa ha crecido y madurado a un excelente nivel en los últimos 10-15 años en nuestro país, y adquiere cada vez una mayor importancia en el contexto internacional. Así, se está llevando a cabo un ejercicio de integración de ofertas y de establecimiento de acuerdos. Se están dando grandes alianzas a nivel nacional, como la que han establecido Escribano, GDELS-Santa Bárbara Sistemas, SAPA e Indra para el desarrollo del vehículo VCR 8x8 para el Ejército de Tierra español a través de la sociedad TESS Defence.
O la formada por SENER, GMV y Escribano para el desarrollo de soluciones en el área de sistemas de misiles y otras municiones guiadas de altas prestaciones en el marco de la iniciativa SMS. En el sector del espacio existe el ejemplo de Caramuel, la primera misión satelital en órbita geoestacionaria orientada a comunicaciones cuánticas, que cuenta con el respaldo de un grupo de empresas y organismos españoles de gran relevancia internacional, liderados por Hispasat y con la participación de Hisdesat, Indra y Grupo Oesía, entre otras.
Del mismo modo, cabe destacar la participación española en el programa europeo Copernicus para la observación satelital de la Tierra. O el reciente acuerdo entre Navantia, Fincanteri y Naval Group. En el ámbito de la defensa aeronáutica, destaca el ambicioso programa FCAS, desarrollado conjuntamente por la industria de Alemania, Francia y España y en el cual por parte de España participan Indra, Airbus SAU, ITP Aero y el consorcio SATNUS (GMV, Sener y Tecnobit).
La industria aeroespacial, de seguridad y defensa: 1,5% del PIB
Las industrias involucradas con estos sectores aportaron 16.500 millones de euros al PIB de España en 2020, el 1,5% del total, según un informe de KPMG. De dicha cifra, 9.805 millones correspondieron a actividades no vinculadas a la defensa y los restantes 6.654 millones a las actividades estrictamente de defensa.
En cuanto al empleo, se ocuparon directa o indirectamente 193.000 personas en España, de las cuales 80.000 lo hicieron en la industria de defensa. El salario medio bruto de los empleos directos fue un 82% superior a la media española global y se generaron 1.900 millones de euros en I+D+i para el conjunto de la economía española.
Entre los participantes en las ponencias y mesas redondas que ya han confirmado su presencia en el Summit, cabe destacar a José Manuel Albares, ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación; Timo Pesonen, director general de Industria de Defensa y Espacio de la Comisión Europea; Raül Blanco, secretario general de Industria y de la Pyme; María Amparo Valcarce, secretaria de Estado de Defensa (Sedef); Antonio Muñoz, alcalde de Sevilla; Soraya Sáenz de Santamaría, socia de Cuatrecasas y ex vicepresidenta del Gobierno; General Miguel Ángel Ballesteros, director del Departamento de Seguridad Nacional del Gabinete de la Presidencia del Gobierno de España, y General Philip Breedlove, Comandante Supremo Aliado de la OTAN entre 2013 y 2016.
España ha demostrado su compromiso con la OTAN a través de su aportación financiera (séptimo contribuyente), la puesta a disposición de la Alianza de medios y capacidades, y la participación en las operaciones que la organización desarrolla. España combina su actuación en la OTAN con la participación activa en la Política Común de Seguridad y Defensa en el seno de la Unión Europea
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