“La obtención de energía limpia a través de la fusión nuclear”. La primera persona que tuvo la visión de un acelerador de partículas en territorio andaluz se llama Antonio Torres y durante muchos años fue alcalde de Lebrija. En la década de los 80 Torres encargó a uno de sus asesores de confianza, experto comunitario, que se pusiera manos a la obra para redactar la memoria de un proyecto revolucionario que atraería la comunidad científica a esta pequeña población del Bajo Guadalquivir.
Torres dio los primeros pasos, se aseguró que el terreno era apropiado y estable para un proyecto tan delicado, pero no pudo contar con los apoyos precisos en el Gobierno de la nación. Aquel documento maestro sigue guardado en el cajón de un despacho junto a otras ideas tan peregrinas como vanguardistas que transformaron la economía de Lebrija donde los grupos de parados en la plaza pasaron a la historia. Torres se preocupó de empaparse a fondo sobre la filosofía del proyecto.
Finalmente, aquel sueño del alcalde lebrijano se convertirá en realidad, pero no en Sevilla sino en la provincia de Granada cuya Universidad se está convirtiendo en una comunidad científica puntera que dará ahora un paso de gigante, irrumpiendo en la élite de las grandes universidades con todos los derechos.
En su entorno, el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, habla sobre el proyecto convencido de que será un antes y un después para Andalucía. El pasado 26 de enero junto a diversas autoridades el presidente andaluz puso la primera piedra del centro de investigación UGR- DONES que la Universidad de Granada levantará en la Ciudad Industrial y Tecnológica de Escúzar para apoyar y reforzar el proyecto matriz, la construcción del acelerador de partículas IFMIF-DONES.
El objetivo final del proyecto es contribuir a la búsqueda de una fuente de energía limpia, barata y en teoría ilimitada. Las estimaciones asocian al IFMIF-DONES un retorno económico para Andalucía de unos 4.000 millones de euros, así como la generación de 35.000 empleos durante toda la vida del proyecto.
“No se trata solo de ello. Estamos hablando no solo de una nueva fuente de energía alternativa y de apostar por el medio ambiente. También es redoblar el prestigio internacional de Granada y Andalucía con una infraestructura única en el mundo. Y de ofrecer a los demás lo mejor de nosotros mismos”, dijo Moreno.
La expresión acelerador de partículas no solamente llamará la atención ciudadana, sino que hará que muchos inversores miren a Granada y Andalucía. Ángel Ibarra director del consorcio creado al efecto sabe que la imagen es muy importante por lo que la sede del centro de gestión administrativa, técnica y económica del Consorcio IFMIF-DONES España tendrá sus oficinas en pleno corazón de Granada, en Puerta Real.
La cesión municipal es de 15 años, prorrogables. El inmueble contará con sala para sede administrativa, otra parte de reuniones para recepciones oficiales y una tercera sala para divulgación y exposición. El acelerador estará en Escúzar, pero hay una labor de promoción institucional y política que necesita de un espacio propio.
Parece de ciencia ficción, pero es la realidad, incluso hay quien pone reparos éticos al proyecto Fusión es la fuente de energía del Sol y las estrellas. Quien se haya interesado sobre ella sabe que es la clave que cambiará el mundo para siempre. Debido al efecto del tremendo calor y la gravedad que se producen en el núcleo de estos cuerpos estelares, los núcleos de hidrógeno colisionan, se fusionan en átomos de helio más pesados y liberan enormes cantidades de energía en el proceso.
La ciencia de fusión del siglo XX identificó la reacción entre dos isótopos de hidrógeno, el deuterio (D) y el tritio (T), como la reacción de fusión más eficiente en el laboratorio. La reacción de fusión DT produce la mayor ganancia de energía a las temperaturas «más bajas».
Se deben cumplir tres condiciones para lograr la fusión en un laboratorio: temperatura muy alta (del orden de 150,000,000 ° Celsius); suficiente densidad de partículas de plasma (para aumentar la probabilidad de que ocurran colisiones); y suficiente tiempo de confinamiento (para retener el plasma, que tiene una propensión a expandirse, dentro de un volumen definido).
A temperaturas extremas, los electrones se separan de los núcleos y un gas se convierte en plasma, a menudo denominado cuarto estado de la materia. Los plasmas de fusión proporcionan el entorno en el que los elementos ligeros pueden fusionarse y producir energía.
El proyecto se ha convertido en “uno de los hitos del proceso de transformación de Andalucía” debido a la trascendencia y el calado de la futura infraestructura. El Gobierno andaluz viene apostando por el desarrollo científico y tecnológico de la comunidad, traducido en 413 millones de euros destinados desde 2019 sólo en materia de I+D+i a través de la Consejería de Universidad, Investigación e Innovación. De ellos, 110 se han invertido en Granada y su provincia. La Consejería de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda viene desarrollando distintos proyectos para mejorar las conexiones, espacios y accesos del Parque de Escúzar.
En concreto está en redacción el proyecto para unir la primera circunvalación con la segunda a través de un corredor verde y una plataforma reservada para el transporte público. Además, para mejorar la movilidad interior del complejo, se está trabajando junto a los responsables del Parque para diseñar rotondas en el tramo de la A-338 que lo atraviesa. Las obras están en marcha y ya nada será igual.
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