Ecologistas en Acción de El Puerto rechaza el proyecto de muelle para yates de lujo en Valdelagrana por entender que se trata de una obra innecesaria por su inviabilidad económica por la falta de demanda previsible, así como por la realización de nuevos dragados y rellenos. "La APBC debería tener entre sus prioridades un uso más racional y sostenible de los terrenos portuarios", expresa la asociación.
Hace unos días, la Presidenta de la Autoridad Portuaria de la Bahía de Cádiz (APBC), Teófila Martínez, presentó en unas jornadas sobre grandes yates y oportunidades de negocio, un proyecto de muelle para megayates de lujo en el dique de levante, junto a la dársena comercial de la margen izquierda de la desembocadura del río Guadalete, en El Puerto.
El proyecto, aún en fase inicial, fue presentado como una de las infraestructuras náuticas más importantes y ambiciosas que se pretende construir en la provincia, y que permitirá aumentar el número de puntos de atraque en la Bahía. En total, 621 amarres para yates de incluso de más de 24 metros de eslora, además de contar con espacios para, entre otros, locales para empresas vinculadas al sector, aparcamientos, viales de acceso, edificio para club náutico y gestión administrativa, e instalaciones para el repostaje, mantenimiento e invernada de buques.
A la asociación le resulta curioso que sea la propia APBC quién pretenda ahora construir un puerto deportivo en el lugar que los ecologistas propusieron en su momento como alternativa a la actual ubicación de Puerto Sherry, esgrimiendo entonces aspectos técnicos para su rechazo. "Ahora se pretende construir un nuevo puerto deportivo sin que Puerto Sherry haya alcanzado ni de lejos las expectativas previstas. ¿Volveremos a tropezar en la misma piedra más de tres décadas después?", manifiestan,
Ecologistas en Acción no cree que este proyecto vendido al igual que Puerto Sherry como generador de riquezas y empleo, vaya a servir más que para un turismo de élite que busca ofertas exclusivas para su propia autosatisfacción.
Según señalan, "el atraque en la dársena comercial de el Puerto de Cádiz de tan solo dos megayates de lujo como el Azzam y el Yas, ambos propiedades de jeques árabes, ha sido la excusa perfecta para demandar la construcción de un muelle para este tipo de barcos de recreo".
"Una nueva oportunidad de negocio para algunos pero de difícil viabilidad para el conjunto de la sociedad", califica la asociación que asegura que la Bahía de Cádiz no es una “zona atractiva” para los propietarios de estos yates de lujo que buscan puntos de mayor exclusividad.
A su vez, han mencionado las "evidentes secuelas sobre la biodiversidad acuática y marina" que supondría la realización de la dársena ya que, para prolongar el muelle, habría que construir un dique de abrigo y la bocana de entrada.
Para la asociación, la APBC debería tener entre sus prioridades un uso más racional de los terrenos portuarios, buscando el interés público y social, y fomentando la actividad industrial sostenible "tan necesaria y demandada actualmente" en el marco de la Bahía de Cádiz.
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