La Junta de Andalucía ha dado un paso decisivo hacia una nueva política forestal con la aprobación de la Ley de Montes de Andalucía (LEMA), que inicia ahora su tramitación parlamentaria. La norma, “largamente esperada por el sector”, busca modernizar la gestión forestal, fomentar el desarrollo sostenible y generar empleo verde en el medio rural.
La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Catalina García Carrasco, destacó durante la inauguración de la jornada ‘Montes con futuro. Gestión, producción y comercialización forestal en la provincia de Cádiz’, organizada por ASAJA Cádiz, que esta ley “nace del diálogo con todos los agentes implicados” y sustituirá a la legislación vigente desde 1992. “Queremos un marco de protección que permita el aprovechamiento de los montes como palanca económica, colaborando también con el sector privado, que representa más del 70% de la superficie forestal”, subrayó.
La jornada, celebrada en Jerez, contó con la participación de la alcaldesa María José García-Pelayo, quien afirmó que “Jerez cuida y ama sus zonas verdes y su masa arbórea”. Recordó que el municipio cuenta con 7.000 hectáreas de montes públicos, más de 150.000 árboles y dos millones y medio de metros cuadrados de zonas verdes, destacando la importancia del sector forestal para la economía local y la conservación ambiental.
García-Pelayo ha felicitado a Asaja por esta nueva jornada de formación y ha recordado que hace pocas semanas tuvo lugar otro encuentro para "tratar la profesionalización del campo, la necesidad de dotar de mano de obra y mejorar las condiciones laborales que es muy importante".
Por su parte, el presidente de Asaja, José Pravia Brugarolas, se ha mostrado muy satisfecho con la aprobación de esta Ley, "al igual que con la Ley de Depredadores que se aprobará antes de final de año y con la primera ayuda forestal de este Gobierno que va a hacer más sostenible el monte y La Ley de Parques que afecta fundamentalmente en la provincia a Grazalema y el parque de los Alcornocales y creemos que tiene un enfoque que es muy positivo porque flexibiliza la inversión privada que creemos es fundamental para que el monte sea viable desde el punto de vista económico y social".
Con esta nueva normativa, la Junta refuerza su compromiso con la sostenibilidad, la protección de los ecosistemas y el impulso de la economía rural, pilares que definirán el futuro del paisaje andaluz.