Después de estar mucho tiempo fuera de los focos, el productor José Luis Moreno ha reaparecido este viernes, cuando ha viajado en avión hasta el Aeropuerto de Jerez para desplazarse a Cádiz para participar en el South International Series Festival.
Acude Moreno a esta cita para presentar la docuserie sobre su vida, que produce Womack Studios, con el nombre de Toma Moreno. Es la primera vez en años que el célebre productor de formatos de éxito como Noche de fiesta o Aquí no hay quien viva se presta a posar en un festival, delante de las cámaras.
"Esta producción me ha hecho recuperar el gusto por mi profesión", decía José Luis Moreno recientemente, en unas declaraciones recogidas por el festival en sus redes sociales.
Después de unos últimos tiempos muy convulsos para el productor, en esta docuserie quiere esclarecer detalles ocultos de la vida de José Luis Moreno, quien ha copado titulares por su supuesta implicación en la Operación Titella, el caso Roemmers, o por las recientes acusaciones de blanqueo de capitales y estafa.
Obligado a devolver 35 millones de euros
En marzo de este año, el productor recibió un duro golpe judicial, ya que fue condenado a devolver 35,2 millones de euros, más intereses, a un antiguo socio con el que trabajó en la producción de la serie Resplandor y Tinieblas, centrada en la vida de San Francisco de Asís, que nunca vio la luz.
Alejandro G. Roemmers, el socio, lo demandó por incumplir sus compromisos contractuales, ya que no entregó ni un capítulo. Ambos empresarios acordaron en 2018 la producción de diez capítulos de 45 minutos, en un plazo de dos años, mediante un préstamo de nueve millones de euros. Un año después, el acuerdo se amplió a 24 capítulos, por 14 millones de euros.
Aunque las cifras finales superaron los 35 millones de euros. La producción nunca se entregó, por lo que Roemmers demandó a Moreno para reclamar la devolución de lo invertido.
Víctima de varios robos
A los numerosos éxitos televisivos de Moreno hay que sumar una serie de capítulos que hacen que su vida sea objeto de interés. Como la brutal paliza que sufrió en las Navidades de 2007 en su chalet de Boadilla del Monte, en Madrid, donde una banda de encapuchados armados lo asaltó.
No es el único asalto sufrido por Moreno, que ya en 1999 sufrió un robo de 33 millones, y nunca se encontró a los culpables. O en 2016, cuando dos asaltantes intentaron robarle en su casa, pero la alarma los detectó y terminaron huyendo.


