"No todo me vale para ganar" es la frase que utilizó la concursante de Maestros de la costura, de TVE, Isabel Gomila. Lo hizo en defensa de sus principios al negarse a utilizar la piel de un animal para confeccionar parte de una prenda de ropa. "Soy vegana, colaboro con santuarios desde hace años y no puedo coser aquí piel, son mis principios", afirmaba la participante en el programa emitido este marte 29 de marzo. A su posicionamiento se unía también el de su compañera Caterina Pascual. La situación ha reavivado la siempre latente polémica sobre el uso de pieles, provocando reacciones de todo tipo, incluyendo la del Partido Animalista Pacma.
La formación política animalista ha explicado a través de un comunicado a raíz de los hechos que "un programa con los niveles de audiencia que tiene Maestros de la costura y que, además, se emite en una televisión pública, no debería estar normalizando el uso de pieles de animales".
El uso de animales para todo tipo de actividades está cada vez más cuestionado gracias a la fuerte presión del activismo animalista, al igual que su consumo directo a través de la alimentación. Actividades como la tauromaquia o la caza gozan, cada vez, de menor popularidad entre la sociedad. Sin embargo, el conflicto ético por el uso de pieles viene desarrollándose desde hace más años que el resto de movimientos ya que tiene el factor añadido de la inutilidad.
Son pocos los que apoyan la existencia de granjas peleteras. Sin embargo, muchas de las pieles que se utilizan provienen de animales que se crían para ser sacrificados con otros fines de aprovechamiento, lo cual ha "suavizado" las críticas. Lo cierto es que, con el paso del tiempo, se observan en las calles menos prendas de piel y casi ningún abrigo clásico, pero la industria de la moda sigue utilizando este material para la confección de ciertos detalles que suelen pasar desapercibidos.
La crueldad en las granjas peleteras y el posicionamiento ético por bandera
El Partido Animalista ha defendido a las concursantes que se han negado a realizar la prueba a pesar de las consecuencias negativas que esto podría conllevar para su participación en el programa. El presidente de la formación política, Javier Luna, manifiesta su "apoyo y total comprensión" hacia la decisión de Caterina e Isabel, y anima a todas las personas a posicionar sus valores a pesar de las presiones.
Para Luna, este ha sido un gesto de valentía: "no es fácil hacer lo que han hecho estas mujeres; corren el riesgo de ser criticadas e incluso puede peligrar su continuidad dentro del programa, pero han dado un ejemplo admirable a quienes temen anteponer sus valores en ciertas situaciones por miedo a las consecuencias o los reproches. Han dado un muy buen ejemplo y una lección".
La confección de la piel también contamina
Si bien uno de los argumentos más utilizados por quienes defienden el uso de las pieles en la ropa es el de la sostenibilidad ecológica, esto no sería cierto desde el punto de vista de organizaciones como PETA, que sostiene que "no hay nada natural en el proceso de hacer ropa de cuero, pieles o lana de animales, ya que esto no solo causa sufrimiento, si no que también colabora al calentamiento global y a la contaminación".
En una declaraciones para la revista Forbes, la entidad explica que "el daño al medio ambiente se da cuando las pieles de los animales son bañadas en distintos químicos como amoniaco, formaldehído, peróxido de hidrógeno y otros que ayudan a que no se pudran en el armario de los compradores". Continúan afirmando que "cuando se despelleja a un animal se producen residuos de fósforo en grandes cantidades, que terminan por contaminar las aguas al limpiar el área de trabajo".
Según PACMA, la cantidad de tratamientos y procedimientos que se precisan para habilitar una piel como prenda de ropa, sumados a la contaminación inherente de su exportación, hacen que la producción de prendas de piel no solo sea "cruel" sino que también es "medioambientalmente insostenible".
La industria textil es la segunda más contaminante del mundo, después de la del petróleo (número uno en emisiones de CO2) y seguida de la alimentaria y la logística.
Las grandes marcas dejan de usar pieles
El Partido Animalista ha puesto como ejemplo el proceder de algunas grandes marcas que han eliminado las pieles de sus productos por diversas razones, imperando la ética y la cantidad de alternativas de alta calidad para confeccionar sus prendas.
Firmas de la talla de Stella McCartney, Gucci, Versace, Calvin Klein, Tommy Hilfiger, Armani, Ralph Lauren, Michael Kors o DKNY han excluido pieles y otros materiales de origen animal de sus productos. Este movimiento ha provocado, incluso, una semana de la moda vegana, cuya primera edición tuvo lugar en el año 2019 en el Museo de Historia Natural de Los Ángeles.
Comentarios (1)