En los últimos años la comida asiática se ha convertido en una opción más. Pasear y ver restaurantes chinos, japoneses o tailandeses ya no sorprende. La globalización también ha aumentado la oferta gastronómica y vivir en España ya no significa alimentarse únicamente con la dieta mediterránea. Aunque las tres mencionadas son las que más éxito han tenido, ahora se están abriendo paso otras propuestas como es el caso de la comida coreana.
Una de las opciones existentes en Sevilla es fruto de la casualidad. Ricardo y Luna viven y trabajan juntos. Él es de Triana y ella de Corea del Sur, pero su proyecto se puede encontrar en el centro de la capital hispalense. Y aunque podrían haberlo planteado como algo 'mixto', lo cierto es que Han's es una apuesta 100% coreana desde la decoración hasta el último sabor que mantenga el paladar.
Ricardo es un trotamundos de los fogones. En su trayectoria ha pasado por restaurantes de Berlín, Viena o Miami hasta que un conocido le propuso marcharse a Corea para dirigir un restaurante de comida española. Después de años viviendo fuera de casa, la intención de este cocinero era, por fin, establecerse en Sevilla, pero aceptó el reto.
Su llegada no fue fácil y el la define como "un choque de culturas". El idioma es completamente distinto y el porcentaje de coreanos que habla inglés es muy bajo. Además, los rótulos están únicamente en el hangul, idioma local con su propio alfabeto.
Lo cierto es que Corea del Sur se trata de un país que poco o nada tiene que ver con España. Por ello, conocer a Luna fue una bendición. "Me ayudó con el idioma y la burocracia. Acabamos viviendo juntos y nos casamos", recuerda. Pese a que todo marchaba bien en el país asiático, donde colaboraba con la Embajada de España en Corea para temas de comida, Ricardo tenía claro que era el momento de volver a Sevilla para montar un negocio. Y quiso hacerlo con Luna. Aunque empezaron en un local pequeño de La Buhaira, a los pocos años ha tenido que trasladarse a uno más grande en la calle Alfonso XII.
El desafío no era sencillo, ni mucho menos. El propio Ricardo, tras sus experiencias internacionales, explica que llevar la comida coreana a España es más complicado que llevar la comida española a Corea. "En todos los países en los que he estado la comida española tiene mucho éxito". Aunque ahora es especialista, él mismo afirma que no conocía la comida coreana. "Cuando llegué a Corea me quedé en shock", señala. El motivo fue conocer los sabores, la fermentación o las especias que tienen.
Una de las cosas más impactantes fue el kimchi, una verdura que no falta en ninguna casa de Corea y que dura un año en el frigorífico sin ponerse mala. "Yo no había visto algo así en mi vida. Además es depurativa". A partir de ahí comenzó a interesarse por cada uno de los detalles. De hecho, cuenta que las casas tienen dos frigoríficos, uno de ellos lleno únicamente de este producto. "Sin el kimchi no son personas".
Nada tiene que ver con la cocina española y así lo refrenda Luna. En Corea el uso de la sal en la comida es nulo. De hecho, Luna sigue prefiriendo la comida coreana porque, según ella, la española tiene demasiada sal. "No usan la sal porque para ellos es como un veneno, trabajan la comida sana. Tienen otra mentalidad. Ellos limpian las venas y por ejemplo la sal las obstruye. En Corea gusta la comida española pero de forma esporádica". El jamón, por ejemplo, no es algo que triunfe.
Ricardo celebra que poco a poco la comida coreana se esté haciendo con un hueco. Hasta ahora ha encontrado mucha gente para la que cualquier modalidad de comida asiática se traducía como "comida china". "Hoy en día ya se está abriendo la puerta y la gente está cambiando de mentalidad".
Para Luna, que lleva meses sin visitar a su familia, la adaptación a España tampoco fue del todo fácil. Sobre todo porque considera que los trámites, en comparación con su país, son mucho más lentos. Lo ha vivido con las licencias para reformar el local o su empadronamiento. No obstante, Luna también reconoce que los españoles en general y sevillanos en concreto son "personas muy amables y simpáticas". "Le digo ya a mi familia que mi casa es Sevilla", añade.
"La comida coreana es en toda Asia la única que lleva en su cultura gastronómica la depuración del organismo, esa es la base", explica Ricardo sobre lo que se puede comer en Corea y, por lo tanto, en su restaurante. "A la vez que cocinan ya piensan en los nutrientes que le tienen que echar a la comida para que le aporte al organismo lo que ellos quieren. Van dos pasos por delante".
En los cuatro años que Han's lleva abierto ha conseguido "un sello" que arrastra al cliente local, pese a haber cambiado de localización, pero también al turista. Que Luna, siendo coreana, lleve la cocina es una garantía para aquel que busca la gastronomía concreta de este país asiático.
Comentarios (1)