San Juan XXIII —Angelo Giuseppe Roncalli— es recordado como uno de los pontífices más queridos del siglo XX, cuya actitud pastoral y mirada abierta renovaron el rostro de la Iglesia. Nacido en una familia humilde en Italia, ejerció con sencillez su ministerio sacerdotal y sucesivamente fue nuncio apostólico en diversas naciones antes de ser elegido Papa en 1958.
Su pontificado, aunque relativamente breve, se caracterizó por el deseo de tender puentes, por la cercanía con los fieles y por una visión de la Iglesia que sale al encuentro del mundo. Uno de sus gestos más decisivos fue la convocatoria del Concilio Vaticano II, que inició precisamente el 11 de octubre de 1962, fecha que más tarde sería adoptada como su fiesta litúrgica. Bajo su dirección empezó una transformación que buscaba aggiornamento —la renovación de la Iglesia en diálogo con los tiempos sin perder su identidad.
Juan XXIII mostró un rostro materno de la Iglesia: promovió la unidad, la paz entre las naciones, la justicia social y la apertura ecuménica. Fue canonizado en 2014, y su memoria sigue siendo estímulo para una Iglesia menos rígida, más cercana, más compasiva. En su testimonio se unen la tradicionalidad con la audacia de quien confía en el torbellino de la gracia de Dios.
Otros santos y beatos conmemorados el 11 de octubre
- San Felipe, diácono: fue uno de los siete elegidos en la comunidad primitiva para servir a los más necesitados, y figura también como primer misionero que llevó el Evangelio a Samaria y luego acompañó a san Pablo en su tránsito.
- San Alejandro Sauli, obispo de Pavía: pastor italiano del siglo XVI reconocible por su celo por la reforma eclesiástica y su labor apostólica.
- San Anastasio de Schemaris: presbítero que acompañó al santo Máximo el Confesor durante su exilio; murió proclamando “lo santo para los santos”.
- San Bruno de Lotaringia: obispo y venerado en la región de Lotaringia por su santidad y gobierno pastoral.
- San Cánico de Irlanda (o Canice / Cainnech): abad irlandés del siglo VI, peregrino y fundador de monasterios, figura de monje eremita y fundador.
- San Gaudencio (Radzim): obispo o mártir del mundo eslavo, memoria venerada en el ámbito local.
- San Gumaro de Lierre: santo de la región flamenca, recluido por su santidad y devoción contemplativa.
- Santa María Soledad Torres Acosta: religiosa española que fundó la Congregación de Siervas de María, dedicada en cuerpo y alma al servicio de los enfermos pobres.
- San Meinardo de Riga: misionero en Livonia, obispo y figura de evangelización del norte europeo.
- San Pedro Le Tuy: sacerdote misionero francés que dedicó su vida al anuncio del Evangelio en contextos difíciles.
- San Santino de Verdún: mártir venerado en la región de Verdún, símbolo local de fidelidad.
- San Sármata de Tebaida: mártir egipcio de la Tebaida, testigo del cristianismo en las primeras persecuciones.
- Beato Ángel Ramos Velázquez: mártir moderno, recordado por su entrega cristiana en medio de persecuciones.
- Beato Jacobo de Ulma Griesinger: sacerdote de vida austera y servicio pastoral, venerado como beato en su región.
- Beata María de Jesús d’Oultremont: viuda belga que, tras enviudar, dedicó su vida al cuidado caritativo y fundó la Sociedad de las Hermanas de María Reparadora.


