San Siricio fue obispo de Roma aproximadamente desde el año 384 hasta su muerte en 399. Su pontificado se desarrolló en una etapa en la que la Iglesia heredaba ya el reconocimiento público tras el edicto de Milán, pero aún afrontaba retos de organización interna, disciplina eclesiástica y relaciones con el poder civil.
Durante su mandato, Siricio fortaleció la autoridad de la sede romana, reafirmó la primacía del Papa como guía de todas las iglesias, promulgo decretos eclesiásticos que ayudaron a estructurar la disciplina de clérigos y la relación entre pastores y fieles. Fue un pastor prudente, cercano y firme ante las controversias doctrinales emergentes. Su martirio, según la tradición, certifica que vivió con autenticidad la oferta total a Cristo incluso cuando la Iglesia accedía a mayor visibilidad pública.
La memoria de San Siricio invita hoy a los creyentes a reconocer que el liderazgo en la Iglesia no es simple autoridad, sino servicio, fidelidad a la verdad del Evangelio y respeto por la comunión fraterna. Su figura permanece como puente entre la tradición apostólica y la Iglesia madura.
Otros santos y beatos conmemorados el 26 de noviembre
- San Leonardo de Porto Maurizio: Sacerdote franciscano italiano del siglo XVIII, misionero incansable que predicó más de 300 misiones en Italia y promovió el Via Crucis.
- San Silvestre Gozzolini: Abad y fundador italiano del siglo XIII, estableció la congregación de los Silvestrinos-Benedictinos tras una experiencia de retiro y recogimiento.
- Beata Giacoma Alberione: Fundadora italiana del siglo XX de la Familia Paulina, dedicada a la evangelización mediante los medios de comunicación.
- Beata Gaetana Sterni: Viuda transformada en religiosa caritativa en Italia del siglo XIX, fundadora de una congregación dedicada a los enfermos y los pobres.
- San Conrad de Constanza: Obispo alemán del siglo X, ejemplo de pastor austero que distribuyó sus bienes y cuidó de su diócesis con humildad.
- San Bellino de Padua: Obispo italiano del siglo XII, asesinado en defensa de la justicia y del pueblo que pastoreaba.