Con bastante frecuencia en juzgados y tribunales las partes de un proceso intentan aportar como prueba el apoyo de lo contenido en conversaciones y mensajes enviados a través de la aplicación de mensajería instantánea o de otras de similares características.
El uso de las nuevas tecnologías en los teléfonos móviles ha conllevado que, con bastante frecuencia, en juzgados y tribunales las partes de un proceso intenten aportar como prueba el apoyo de lo contenido en conversaciones y mensajes enviados a través de la aplicación WhatsApp o de otras de similares características.
Con respecto a la validez de estas pruebas, hay que señalar que aún no hay regulación específica sobre este asunto. Por tanto, cabe reclamar de cara al futuro una legislación al respecto para regular este asunto.
Por ejemplo, en el ámbito de reconocimiento de deudas que imaginemos que se ha consentido en una conversación o en casos de amenazas, insultos, etcétera. También en el ámbito del derecho de familia podría tener alguna consideración. Por tanto, al ser una realidad social importante y un canal de comunicación básico hoy en día, prácticamente en todas las facetas de nuestras vidas puede tenerse en cuenta como medio probatorio importante.
Hay que responder afirmativamente a esta pregunta, tanto en los órdenes civil como penal, pero hay que señalar que en los juzgados se están admitiendo conforme a una serie de condiciones. No todo vale.
Podría ser por la mera transcripción privada acompañada de impresiones de la pantalla del teléfono, aunque para asegurarlo lo ideal es aportar el propio teléfono y solicitar que se de fe pública mediante acta del letrado de la administración de justicia o por acta notarial del contenido.
Sí. Para ajustar los criterios con los que se debe admitir este tipo de pruebas en los procedimientos judiciales y acabar con las posibles disparidades que se producen en los tribunales.
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