Paco Camas, delegado de Cultura del Ayuntamiento de Jerez
El socialista estuvo varias semanas indicando que la posibilidad de las zambombas, en espacios controlados, y con distancia, era más que real. Más que optimismo, era hablar con una alegría desmesurada y poco realista. Ni para la hostelería ni para la cultura será una buena Navidad, por mucho que pudieran mejorar las cosas. Nadie tiene una bola de cristal, claro, pero la Navidad en Jerez, desde el punto de vista cultural, debía pasar por esa realidad, la de que no podrían celebrarse ni zambombas en la calle ni espectáculos navideños como los que ha habido hasta ahora. Ni parecidos. Ni en la calle. Esta semana, la alcaldesa de Jerez ha tenido que salir a desmentir cualquier posibilidad de que se celebren en base a la ordenanza municipal que las regula. Un riesgo que nunca podía plantearse como tal. El ejemplo contrario es Cádiz, que cuando en septiembre las cosas iban bien fue realista y anunció que el carnaval de 2021 no se podría celebrar.
Isabel Paredes, delegada de la Junta en Cádiz para Salud y Familias
Sus palabras asegurando que la situación en el Hospital de Jerez está "controlada" han sentado muy mal en la plantilla. Fueron los propios trabajadores los que advirtieron públicamente de la situación. Jerez amaneció el pasado lunes con solo una UCI operativa. Llegaron a ocuparse camas de despertar quirúrgico como puestos UCI para pacientes covid. Y después, Paredes, delegada de Salud y Familias en la provincia de Cádiz, negó la realidad. El coronavirus es un pulso a todos los niveles imaginables: social, sanitario, económico y político. Pero negar su gravedad no va en la línea de encontrar soluciones. Mientras negaba esa realidad, el hospital de Jerez ya ponía en marcha una carpa junto a Urgencias de la que, por cierto, no ha dado detalles. Esperemos que al menos la actitud de Paredes sea la de tratar de no enviar un mensaje a la población, aunque ésta tengo derecho a saber lo que ocurre. Peor sería que, como decía CCOO en su nota de prensa, fuera fruto de desconocer realmente la realidad. Si el hospital de la ciudad más grande de la provincia es una incógnita en una pandemia para Paredes, debería asesorarse mejor.
Jesús Rodríguez, presidente de Cruz Roja Jerez
El abogado, profesor de la UCA y miembro activo en diversos foros de la ciudad tomó la presidencia de la institución tras la salida de Evaristo Babé. En los pasados días, presentó el proyecto Acércate, en el que Cruz Roja de la mano de la Junta participa en la integración laboral de medio centenar de mujeres víctimas de violencia de género. Es fundamental para estas personas llegar al mercado laboral, pues afianza su independencia frente a parejas que han usado sus recursos como forma de mantener esa opresión. Una más de las muchas iniciativas de Cruz Roja para la provincia de Cádiz. Rodríguez es una persona experimentada y seguro que sigue logrando sacar adelante proyectos como éste mientras dure su presidencia.
Javier Menéndez, director del Teatro Maestranza
Esta semana ha tenido lugar la retransmisión vía streaming de la ópera Così fan tutte, que ha llegado incluso a Canal Sur. En estos tiempos de pandemia, renovarse es una manera de no morir. El teatro retransmitido quizás sea menos teatro, pero cuando las opciones de la presencialidad escasean, contar con una retransmisión puede ser lo que marque la diferencia para que los actores sigan trabajando, se siga consumiendo cultura y el Maestranza no pierda su posición sobre el eje de buena parte de la cultura sevillana. El Maestranza ha estado a la altura gracias a la altura de miras.
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