Después de todo lo acontecido esta semana atrás en España, poco me apetecía escribir sobre algunos hechos y sobre el circo que se ha montado y retransmitido para vergüenza de los ciudadanos en todas partes del mundo. Tengo que confesar que cuando me confirmaron en un descanso de mi jornada laboral que Pedro Sánchez volvía a ser presidente, casi sentí alivio al pensar que ya la función principal del “circo de los diputados” se había terminado y que los mediocres payasos ya al fin terminaron su función.
Aunque empachada de tanta política, deseaba que todo se acelerara de una vez lo antes posible, me parece inaudito, aun a riesgo de parecer tonta con la facilidad que las autoridades y los medios nos manipulan para hacernos saltar de un escenario a otro y que nos olvidemos de los nefastos finales en el fugaz tiempo que empleamos en apretar el botón del mando de la televisión. Internet y redes sociales son los encargados de borrar cualquier rastro de aquello que no interesa a los que nos gobiernan. En esta ocasión la gala de los Grammy latinos nos ha transportado de nuevo “Al país de las maravillas”.
Noticias con titulares como “Gestores internacionales ya descartan a España como país para invertir” o “Los convocantes del 18-N piden una asistencia masiva” “Se está desmoronando nuestra democracia” (leídos en la prensa digital) quedan en un segundo plano y las portadas de la mayoría de medios del pasado viernes se inundaban con los Grammy y la cantante Rosalía entre otros. En definitiva, que la mayoría en este país y en Andalucía se ha enterado de que “Niña Pastori” fue ganadora de un merecido Grammy, pero seguro que algunos y no pocos si leyeran este artículo se terminarán ahora de enterar de que ayer sábado hubo una manifestación por algo realmente importante para todos y no solo para nuestros artistas. Seguro que también hubo quien se desplazó hasta Sevilla para intentar conocer a algún famosillo, pero el sábado acudir a una manifestación da mucha pereza.
Y quedará quien aún niegue que estamos manipulados y que los teléfonos móviles que se han vuelto imprescindibles para todos son la mayor herramienta para conseguirlo. No pasará mucho tiempo para que veamos que el estado de ayudas para financiar la compra de estos dispositivos, así como otros digitales de moda. Ya en los colegios se han implantado las pizarras digitales y tabletas que son una gran ayuda para el desarrollo de la educación de nuestros futuros adultos. Recordemos que en Noruega se vuelve a leer en papel debido a que la comprensión lectora de los estudiantes ha empeorado. Esto me hace preguntarme si volver a leer la prensa en papel no haría que comprendiéramos de una vez lo que de verdad importa.
Igual no nos encontramos en el mejor momento para este tipo de celebraciones con lo que está cayendo en este país y fuera del mismo. El mundo sigue claro que si y una vez terminados los Grammy, nuestro presidente del gobierno seguirá adelante con una amnistía a la cual ojalá podamos darle la espalda tan fácilmente como lo hacemos cuando cambiamos de canal la televisión o eliminamos de la pantalla del teléfono o el portátil aquello que nos parece demasiado difícil de afrontar y es mejor dejarlo en manos de otros.
“La enfermedad del ignorante es ignorar su propia ignorancia”, Amos Bronson.
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